30 Junio 2025
El paso de Lionel Messi por Paris Saint Germain dejó una huella difícil de olvidar en Francia. Aunque llegó con grandes expectativas, la última etapa de su estadía estuvo marcada por críticas, silbidos y abucheos, reflejando la ambivalencia de los aficionados hacia su desempeño. Esta tensión resurgió con fuerza durante el reciente Mundial de Clubes, cuando el rosarino se enfrentó nuevamente a su exequipo, el PSG, ahora vistiendo la camiseta del Inter Miami.
Antes del duelo de octavos, el prestigioso diario francés L'Equipe encendió la polémica con su portada titulada: “Messi, no todo se perdona”. Tras la contundente derrota 4-0 de PSG frente al equipo dirigido por Luis Enrique, el periodista Vicente Duluc lanzó un duro comentario. “No es la primera vez que vemos a Lionel Messi caminar mientras los jugadores del PSG corren, pero el contraste durante el primer tiempo fue considerable”. Una crítica que evidenció el descontento hacia la actitud del astro argentino.
Sobre la actuación de Messi, Duluc añadió. “Un poco de magia, incluso a cámara lenta, volvió a la superficie, con un pase magnífico a Luis Suárez, cuya viveza no es su principal cualidad al final de su carrera (49'), un desvío muy propio del Barcelona hacia Jordi Alba (51'), y el primer disparo a puerta de Miami, con la zurda, por supuesto (63'), sin mayores problemas para Donnarumma”. Esta reflexión mostró que, pese a las críticas, el 10 aún conservaba destellos de su talento.
El análisis final sobre el desempeño de Messi fue contundente. “La magia vino evidentemente acompañada de orgullo, ya que el campeón del mundo argentino transformó con maestría algunas de las jugadas de su equipo. Fue él, de hecho, quien obligó a Donnarumma a realizar su parada más difícil, un cabezazo que el portero italiano tuvo que recuperar rápidamente del suelo (80'). Y luego estuvo ese último tiro libre que Suárez atrapó, como antes, pero que se estrelló contra la barrera parisina (88'): la verdad es que no fue su día”.
Una experiencia olvidable
La etapa de Messi en Francia se extendió desde mediados de 2021 hasta mediados de 2023, donde formó una delantera soñada junto a Kylian Mbappé y su amigo Neymar. En total, disputó 75 partidos, anotó 32 goles y dio 35 asistencias, además de ganar dos veces la Ligue 1 y una Supercopa de Francia. Sin embargo, las expectativas más altas, especialmente en la Champions League, no se cumplieron, ya que el PSG quedó eliminado en octavos en ambas temporadas.
El fracaso internacional, sumado al triunfo de Messi con Argentina en el Mundial de Qatar 2022, justo frente a Francia en la final, provocó un cambio drástico en la percepción de los fanáticos parisinos, que pasaron del cariño al rechazo. Así, al concluir su segundo año en París, Messi tomó la decisión de emigrar hacia el Inter Miami, buscando un nuevo rumbo para su carrera.
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