06 Mayo 2004
Con pancartas, bombos, redoblantes, bombas de estruendo y bocinazos se realizó anoche la segunda movilización vecinal para exigir la intervención de la Municipalidad de Famaillá, a cargo de José Fernando Orellana.
"Gobernador, ¿qué pasa que no reacciona?", se pudo leer en uno de los tantos carteles que portaban los manifestantes, que repitieron el mismo recorrido de la semana pasada. Alrededor de las 20, se concentraron en la plaza principal (San Martín). Allí instalaron parlantes a través de los cuales se escuchaba el tango "Cambalache" y también "La marcha de la bronca". Luego comenzaron la caminata hacia el domicilio particular del intendente Orellana, ubicado en Lavalle al 100. En la misma cuadra funciona un local comercial que pertenece a Miguel Angel "Piki" Orellana (hermano del intendente y detenido por orden judicial). Algunos comerciantes exteriorizaron su apoyo a la marcha desde la puerta de sus locales.
La movilización, encabezada por un patrullero, se dirigió a la sede de la Municipalidad, que está al lado del edificio donde funciona el Concejo Deliberante. Ambos inmuebles fueron custodiados por personal policial, de esa ciudad, que se apostó en la vereda al paso de los manifestantes. Sin embargo, no llegaron a intervenir, porque la protesta se realizó en forma pacífica.
Duras acusaciones
"Desde 1995 hasta ahora ha endeudado al municipio en 17 millones de dólares, estafó a los empleados, a los comerciantes e introdujo la droga en Famaillá", afirmó Fernando Iosa.
En un improvisado palco, el comerciante cargó contra el jefe municipal. "Antes, Orellana era un feriante y en nueve años se convirtió en millonario, porque ha robado una fortuna", señaló.Además advirtió que si el gobernador, José Alperovich, no responde al reclamo de intervención, los vecinos están dispuestos a tomar la Municipalidad. A esa iniciativa también se sumó el dirigente Orlando Heredia, quien pidió a la gente que pierda el miedo a movilizarse.
Ambos anunciaron que hoy un grupo de vecinos concurrirá a la Casa de Gobierno para intentar dialogar con el gobernador Alperovich.
"Si él (por el mandatario provincial) no nos da una respuesta concreta, voy a ser el primero en tomar la sede municipal, porque a Orellana no le tengo miedo", remarcó Iosa.
"Gobernador, ¿qué pasa que no reacciona?", se pudo leer en uno de los tantos carteles que portaban los manifestantes, que repitieron el mismo recorrido de la semana pasada. Alrededor de las 20, se concentraron en la plaza principal (San Martín). Allí instalaron parlantes a través de los cuales se escuchaba el tango "Cambalache" y también "La marcha de la bronca". Luego comenzaron la caminata hacia el domicilio particular del intendente Orellana, ubicado en Lavalle al 100. En la misma cuadra funciona un local comercial que pertenece a Miguel Angel "Piki" Orellana (hermano del intendente y detenido por orden judicial). Algunos comerciantes exteriorizaron su apoyo a la marcha desde la puerta de sus locales.
La movilización, encabezada por un patrullero, se dirigió a la sede de la Municipalidad, que está al lado del edificio donde funciona el Concejo Deliberante. Ambos inmuebles fueron custodiados por personal policial, de esa ciudad, que se apostó en la vereda al paso de los manifestantes. Sin embargo, no llegaron a intervenir, porque la protesta se realizó en forma pacífica.
Duras acusaciones
"Desde 1995 hasta ahora ha endeudado al municipio en 17 millones de dólares, estafó a los empleados, a los comerciantes e introdujo la droga en Famaillá", afirmó Fernando Iosa.
En un improvisado palco, el comerciante cargó contra el jefe municipal. "Antes, Orellana era un feriante y en nueve años se convirtió en millonario, porque ha robado una fortuna", señaló.Además advirtió que si el gobernador, José Alperovich, no responde al reclamo de intervención, los vecinos están dispuestos a tomar la Municipalidad. A esa iniciativa también se sumó el dirigente Orlando Heredia, quien pidió a la gente que pierda el miedo a movilizarse.
Ambos anunciaron que hoy un grupo de vecinos concurrirá a la Casa de Gobierno para intentar dialogar con el gobernador Alperovich.
"Si él (por el mandatario provincial) no nos da una respuesta concreta, voy a ser el primero en tomar la sede municipal, porque a Orellana no le tengo miedo", remarcó Iosa.
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