28 Noviembre 2015
BUENOS AIRES.- El presidente electo, Mauricio Macri, recibirá el 10 de diciembre una administración pública nacional con varias áreas excedidas en el gasto, lo que obligaría a su gestión o, en todo caso, a la actual presidenta, Cristina Fernández, a disponer ampliaciones presupuestarias a través de un decreto de necesidad y urgencia o bien a una reasignación de créditos mediante decisiones administrativas de la Jefatura de Gabinete.
Al 22 de noviembre, la administración pública nacional en su conjunto tiene comprometido el 88,8% del presupuesto ajustado ($ 1,17 billón sobre $ 1,3 billón), de acuerdo con el relevamiento de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP). Ese porcentaje se ubicó más o menos en línea con las erogaciones previstas para esa altura del año, aunque esto se debió a las constantes modificaciones y ampliaciones del Presupuesto original.
Según la ley 27.008, el Presupuesto contemplaba un gasto no mayor a $ 1,2 billón, unos $ 67.000 millones menos al vigente, a raíz de las modificaciones dispuestas por decisiones administrativas y, hasta el momento, un decreto de necesidad y urgencia. Pero un análisis detallado de las diferentes unidades ejecutoras permitió comprobar que hay más de 40 áreas de los tres poderes del Estado que superaron ese porcentaje y en algunos casos extremos está cercanos al 100%, 39 días antes de la finalización del año.
Esos fueron los casos del programa Fútbol para Todos (99,6% de gasto comprometido a la misma fecha), el Instituto Nacional de Medicina Tropical (98,3%) o la Secretaría de Políticas Universitarias (97,9%), dependencias que requerirían de refuerzos en sus créditos, teniendo en cuenta que corresponde hacer desembolsos de los salarios de noviembre y diciembre y de la segunda cuota del Sueldo Anual Complementario (SAC).
En el caso de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), con un gasto comprometido al 91,8% del total anual, si bien el porcentaje no está entre los más elevados, tiene un margen relativamente estrecho. (DyN)
Al 22 de noviembre, la administración pública nacional en su conjunto tiene comprometido el 88,8% del presupuesto ajustado ($ 1,17 billón sobre $ 1,3 billón), de acuerdo con el relevamiento de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP). Ese porcentaje se ubicó más o menos en línea con las erogaciones previstas para esa altura del año, aunque esto se debió a las constantes modificaciones y ampliaciones del Presupuesto original.
Según la ley 27.008, el Presupuesto contemplaba un gasto no mayor a $ 1,2 billón, unos $ 67.000 millones menos al vigente, a raíz de las modificaciones dispuestas por decisiones administrativas y, hasta el momento, un decreto de necesidad y urgencia. Pero un análisis detallado de las diferentes unidades ejecutoras permitió comprobar que hay más de 40 áreas de los tres poderes del Estado que superaron ese porcentaje y en algunos casos extremos está cercanos al 100%, 39 días antes de la finalización del año.
Esos fueron los casos del programa Fútbol para Todos (99,6% de gasto comprometido a la misma fecha), el Instituto Nacional de Medicina Tropical (98,3%) o la Secretaría de Políticas Universitarias (97,9%), dependencias que requerirían de refuerzos en sus créditos, teniendo en cuenta que corresponde hacer desembolsos de los salarios de noviembre y diciembre y de la segunda cuota del Sueldo Anual Complementario (SAC).
En el caso de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), con un gasto comprometido al 91,8% del total anual, si bien el porcentaje no está entre los más elevados, tiene un margen relativamente estrecho. (DyN)
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