Un joven catamarqueño acusa a la policía de haberlo patoteado

CATAMARCA.- El domingo 25, a la madrugada, Iván Augusto Sánchez, de 36 años, sufrió una feroz golpiza frente al boliche "La Cabaña”, ubicado en la localidad turística de Balcozna. Según su denuncia, un grupo de la Guardia de Infantería de la policía provincial lo golpeó salvajemente luego de que éste protagonizara una pelea en el interior del local.

Según el damnificado, la golpiza comenzó cuando éste les advirtió que acudiría a la Justicia si le pegaban. La víctima terminó con traumatismos múltiples y quebradura de nariz y de uno de los brazos.

Sánchez relató al diario "El Ancasti": "Eran las 3.30 más o menos. Estaba dentro del boliche junto a mi pareja cuando me crucé con un hombre de apellido Maya. Discutimos por cuestiones personales, sin llegar a agredirnos físicamente. Se nos acercó personal de Infantería -cinco hombres y dos mujeres-, que estaban de seguridad en el local, y nos sacaron a la calle. Una vez en la vereda, continuamos con la discusión. Maya me golpeó con su pie en una pierna y, de repente, los efectivos se vinieron encima".

Una vez afuera del boliche, Sánchez recibió un golpe con una cachiporra y allí fue que les expresó: “Si me volvés a pegar, te denuncio”. Aparentemente, esto provocó la ira de los uniformados, quienes comenzaron a agredir a la víctima con patadas, golpes de puño y palos hasta dejarlo inconsciente en el piso, consignó "El Esquiú".

Según consta en la denuncia, la paliza fue presenciada por otros jóvenes, quienes estaban afuera del boliche y eran conocidos de Sánchez, pero los agresores comenzaron a disuadir a los curiosos que pretendían capturar imágenes de la brutal golpiza.

El agredido acudió a los medios por recomendación de su abogado defensor, quien además recalcó que la denuncia no sólo es mediática sino que se está tramitando también a través del fuero penal.

También contó que -cuando lo llevaron a la comisaría luego de que haya quedado inconsciente en el piso- los policías le dijeron que tenía que firmar unos papeles en blanco para evitar que una vez que le otorguen la libertad les pueda llegar a realizar algún tipo de denuncia en su contra.

“Por supuesto que yo los firmé, quería salir lo más rápido de allí, sentía mucho temor, si así me pegaron afuera, con la presencia de toda la gente, no quería ni imaginarme lo que me podría llegar a ocurrir adentro en la comisaría”, dijo. En la misma denuncia consta que Sánchez también fue revisado por un médico, pero antes, los policías que lo habían agredido salvajemente afuera del boliche le dijeron: “si querés salir ya mismo, tenés que decir que no tenés nada y nosotros te dejamos salir”, según expresó la víctima.

El joven manifestó que fue un grupo de Infantería de la policía de la provincia, de zona Norte, según las averiguaciones que realizó, y que quien estaría a cargo de ese grupo sería el oficial ayudante Sebastián Varela, en compañía del cabo Jorge Montivero y los demás serían los agentes Salcedo, Miguel Mercado, Carolina Bogoya, Cintia Correa, Fabio Morales, Jonathan Centurión y Luis Palacios. "Sólo podría reconocer a tres o cuatro de ellos, ya que con la situación, lo único que hice fue cubrir mi rostro para que no me maten”, agregó.