21 Febrero 2012
CATAMARCA.- Varias poblaciones de la localidad catamarqueña de Fiambalá continuaban hoy aisladas y no podían recibir agua potable ni alimentos a raíz de la crecida de ríos, lo que llevó a solicitar un helicóptero a Santiago de Estero.
La crecida de los ríos de la localidad de Fiambalá, departamento Tinogasta en el oeste catamarqueño, mantiene hace seis días aislados a los pobladores de distintos barrios que no pueden ser atendidos por los caminos intransitables y cortados.
Eso provoca que la ayuda enviada por el Gobierno provincial no pueda ser distribuida y ahora esperaba que las lluvias cesen para que el helicóptero cedido por Santiago del Estero pueda llegar con agua potable, alimentos y asistencia sanitaria.
Después de que el intendente de Fiambalá, David Amado Quintar, declaró el estado de emergencia, la gobernadora catamarqueña Lucía Corpacci se reunió esta mañana con un comité de emergencia para planificar la ayuda para vecinos de los departamentos de Tinogasta, Belén y parte de Santa María afectados por la lluvia caída desde hace una semana.
De acuerdo al informe brindado por personal de prensa de la Casa de Gobierno, la zona más afectada es el oeste provincial.
Tinogasta sigue siendo el departamento con más problemas por la crecida del río Abaucán que no permite que se acceda a varias localidades de Fiambalá, como es el caso de Medanitos y El Tatón donde no se puede llegar a los vecinos hasta que no baje el agua; al igual que en Las Papas, La Ciénaga, Chuquisaca, Río Grande, Aguas Negras, donde la lluvia inundó algunos barios y dañó cultivos.
Por otra parte, la lluvia que cae desde anoche en la Capital provincial y en departamentos vecinos provocó que La Quebrada de la Cébila, que es uno de los límites naturales entre Catamarca y La Rioja y la ruta obligada para comunicar San Fernando del Valle de Catamarca con departamentos como Tiinogasta, Fiambalá, Belén, Andalgalá y Pomán, este intransitable por los derrumbes que bloquean la calzada. (DyN)
La crecida de los ríos de la localidad de Fiambalá, departamento Tinogasta en el oeste catamarqueño, mantiene hace seis días aislados a los pobladores de distintos barrios que no pueden ser atendidos por los caminos intransitables y cortados.
Eso provoca que la ayuda enviada por el Gobierno provincial no pueda ser distribuida y ahora esperaba que las lluvias cesen para que el helicóptero cedido por Santiago del Estero pueda llegar con agua potable, alimentos y asistencia sanitaria.
Después de que el intendente de Fiambalá, David Amado Quintar, declaró el estado de emergencia, la gobernadora catamarqueña Lucía Corpacci se reunió esta mañana con un comité de emergencia para planificar la ayuda para vecinos de los departamentos de Tinogasta, Belén y parte de Santa María afectados por la lluvia caída desde hace una semana.
De acuerdo al informe brindado por personal de prensa de la Casa de Gobierno, la zona más afectada es el oeste provincial.
Tinogasta sigue siendo el departamento con más problemas por la crecida del río Abaucán que no permite que se acceda a varias localidades de Fiambalá, como es el caso de Medanitos y El Tatón donde no se puede llegar a los vecinos hasta que no baje el agua; al igual que en Las Papas, La Ciénaga, Chuquisaca, Río Grande, Aguas Negras, donde la lluvia inundó algunos barios y dañó cultivos.
Por otra parte, la lluvia que cae desde anoche en la Capital provincial y en departamentos vecinos provocó que La Quebrada de la Cébila, que es uno de los límites naturales entre Catamarca y La Rioja y la ruta obligada para comunicar San Fernando del Valle de Catamarca con departamentos como Tiinogasta, Fiambalá, Belén, Andalgalá y Pomán, este intransitable por los derrumbes que bloquean la calzada. (DyN)
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