07 Octubre 2009
El presidente de Fuerza Republicana (FR), Ricardo Bussi, ratificó ayer que el senador Carlos Salazar votará por la sanción en general de la ley de medios impulsada por el Gobierno nacional. Aclaró que no hubo mandato partidario para que actúe de esa manera, pero consignó que la junta de gobierno de FR lo avala.
Salazar cambiará, así, de actitud respecto del crucial debate de pasado mañana. Anteriormente, el viernes pasado, junto con sus pares Roxana Latorre, Juan Carlos Romero, Juan Agustín Pérez Alsina, Liliana Negre de Alonso, Hilda González de Duhalde y Delia Pinchetti de Sierra Morales, se comprometió a "votar negativamente" la iniciativa aprobada por Diputados. El Interbloque Federal argumentó, entonces, que la iniciativa gubernamental motivaba "serias discrepancias políticas, institucionales y constitucionales", entre ellas la vulneración de la autonomía federal.
El viraje posicional de Salazar no ensambla con el diagnóstico que el legislador Bussi trazó respecto del debate que encaró el Senado.
Dos monstruos
"Los Bussi desde hace 20 años estamos siendo objeto de una campaña de desprestigio por partes de los medios masivos de comunicación, especialmente de Buenos Aires", afirmó el titular de FR.
Sin identificar a esos medios, el legislador les imputó reemplazar sistemáticamente el apellido de su padre por calificativos tales como "genocida" o "represor". "Tampoco hemos visto que se hayan rasgado las vestiduras cuando (Néstor) Kirchner atropellaba instituciones fundamentales como la Iglesia y el Ejército", agregó."Muchos de estos medios han sido socios de Kirchner durante más de seis años, hasta que este parece haberse decidido a pisarle el negocio", precisó. "Esta es una pelea entre dos monstruos, por lo tanto, nuestro partido, que ha sido el fundado por el enemigo público número de ambos, no puede fijar postura", dijo.
Salazar cambiará, así, de actitud respecto del crucial debate de pasado mañana. Anteriormente, el viernes pasado, junto con sus pares Roxana Latorre, Juan Carlos Romero, Juan Agustín Pérez Alsina, Liliana Negre de Alonso, Hilda González de Duhalde y Delia Pinchetti de Sierra Morales, se comprometió a "votar negativamente" la iniciativa aprobada por Diputados. El Interbloque Federal argumentó, entonces, que la iniciativa gubernamental motivaba "serias discrepancias políticas, institucionales y constitucionales", entre ellas la vulneración de la autonomía federal.
El viraje posicional de Salazar no ensambla con el diagnóstico que el legislador Bussi trazó respecto del debate que encaró el Senado.
Dos monstruos
"Los Bussi desde hace 20 años estamos siendo objeto de una campaña de desprestigio por partes de los medios masivos de comunicación, especialmente de Buenos Aires", afirmó el titular de FR.
Sin identificar a esos medios, el legislador les imputó reemplazar sistemáticamente el apellido de su padre por calificativos tales como "genocida" o "represor". "Tampoco hemos visto que se hayan rasgado las vestiduras cuando (Néstor) Kirchner atropellaba instituciones fundamentales como la Iglesia y el Ejército", agregó."Muchos de estos medios han sido socios de Kirchner durante más de seis años, hasta que este parece haberse decidido a pisarle el negocio", precisó. "Esta es una pelea entre dos monstruos, por lo tanto, nuestro partido, que ha sido el fundado por el enemigo público número de ambos, no puede fijar postura", dijo.
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