Queda menos de un mes para el comienzo del invierno, aunque los días frescos ya empezaron a aparecer en Tucumán. Tanto padres como referentes de los gremios docentes advirtieron que muchos establecimientos no están preparados para las bajas temperaturas, una problemática que se dio también en años anteriores.

“Claramente hay establecimientos no preparados para los extremos climáticos. Más del 80% no tiene sistema de calefacción por aula”, señaló a LA GACETA Mario Dionisi, secretario gremial local del Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop).

Dionisi indicó que el Ministerio de Educación podría tomar medidas al respecto. “Siempre algo podrían hacer, generar las líneas accesibles de crédito para que puedan tomar los colegios, generar las mesas del sector que busque las soluciones. Son los principales responsables de generar las políticas de cuidado”, reflexionó.

Carlos Giménez, referente del Sindicato Docente de Tucumán (Sidot), coincidió con la estadística presentada por Dionisi, remarcando que solamente entre un 10 y un 20% de los colegios en Tucumán tiene calefacción. Pero el principal problema, según su mirada, pasa por la falta de inversión en el tendido eléctrico, ya que, sin esto, ni siquiera las escuelas con equipamiento adecuado pueden funcionar correctamente, alegó.

“La mayoría de las escuelas que tienen calefacción tienen estufas eléctricas. Esto implica que el tendido eléctrico se sobrecarga mucho en ese momento; salta la llave, hay riesgo de incendio. No hubo inversiones como para poder tener un tendido eléctrico acorde a todo esto”, apuntó Giménez que, aclaró, es ingeniero eléctrico.

Además, apuntaló que muchas de las escuelas que cuentan con sistemas de calefacción, lo tienen gracias a la movilización de los padres. “Es voluntario, no es sistemático por parte del Ministerio de Educación para poder sobrellevar la situación”, dijo al respecto. Y apuntó contra la cartera encabezada por Juan Pablo Lichtmajer: “nunca hubo una escucha por parte del Ministerio a estas problemáticas”.

Alerta en los valles

Padres de diferentes escuelas tampoco ocultaron su temor por la situación, sobre todo en aquellos establecimientos que cuentan con menos recursos, y donde la situación edilicia no es la mejor. Entre ellas, escuelas de alta montaña, donde el frío afecta en un grado mayor.

“La escuela no cuenta con calefacción. Algunos cursos tienen aire acondicionado (frío-calor), pero no funcionan, por lo que nos dijeron las maestras. Hace mucho venimos pidiendo, pero nadie da una solución”, reclamó la madre de una alumna de una escuela ubicada en Amaicha del Valle.

Pastrana remarcó que es común que las propias maestras del establecimiento lleven su propia estufa, para afrontar el frío. “Estamos viendo con los padres si entre todos podemos poner para comprar”, dijo Flora, que reveló que tuvieron reuniones con un delegado del Ministerio de Educación, Carlos Mendizábal, quien les mencionó que “no hay fondos para todo esto”.

El director de la Escuela N°10, Juan Carlos Ale, también subrayó la necesidad de contar con sistema de calefacción. “Los grados son grandes, los techos son altos”, contó sobre las características del establecimiento, que tiene un total de 18 cursos, entre jardín, primaria y dos secciones adicionales. Ale contó que integrantes del equipo de Bienestar Educativo hicieron un relevamiento en el lugar, pero no mencionaron nada sobre la posibilidad de otorgar sistemas de calefacción.

Otra directora de un establecimiento de alta montaña, que prefirió no revelar su identidad, dijo a LA GACETA que en su escuela, hay sólo 2 caloventores, insuficientes para afrontar el frío. El establecimiento tiene incluso dependencias a las que le falta el cielorraso, contó la directora.

“La escuela es de piedra y barro, es helada. Quiero habilitar unas salamandras para que podamos pasar el invierno”, detalló la docente, que agregó que necesitan caños galvanizados para que ese sistema de calefacción, a leña, funcione.

Padres movilizados

No solamente en las escuelas de los valles son los padres de los alumnos los que se organizan para encontrar soluciones; esto se repite en distintos establecimientos de la provincia.

“Hasta el momento no estamos preparados para temperaturas bajas. La escuela nunca contó con ese tipo de electrodomésticos para los niños, tanto en el frío como en el calor. Las mamás querían juntar dinero para comprar estufas”, relató a LA GACETA Tamara Chávez, madre de alumnos de la escuela Diego de Rojas, de Famaillá. “Siempre hubo ayuda de los padres para poder sacar adelante la escuela”, recalcó.

Karina Gonzalo, madre de la escuela Raúl Colombres, de la Capital, dijo que en la institución “no hay calefacción, pero los padres se juntan entre todos y compramos calefactores para todos los grados”. Sin embargo, aclaró que “no pueden funcionar todos a la vez, porque saltan las llaves”.

“La escuela no está preparada para recibir el frío, no hay ninguna clase de calefacción. Los chicos entran a las 7:30 de la mañana y salen a las 16, son muchas horas”, manifestó, por su parte, Clara Alderetes, madre de una alumna de la escuela N° 210 Gregorio Aráoz de Lamadrid, ubicada en La Aguadita.

Palabra oficial

Marcelo Romero, Secretario de Bienestar Educativo, indicó a LA GACETA que desde el Ministerio de Educación se realizaron, y se vienen realizando, todas las gestiones pertinentes para que las escuelas estén equipadas.

“Desde los inicios de la gestión se ha trabajado de manera previsible para el invierno. Con fondos provinciales se han comprado salamandras, calefactores y estufas para la zona de alta montaña, y también para las zonas bajas. Desde el año pasado, con la llegada de los Fondos Fores y Cooperar se han podido comprar caloventores, estufas, y aires acondicionado de frío y calor”, explicó Romero.

Con respecto al caso particular de las escuelas de alta montaña, señaló que hay políticas de estado alusivas. “El Ministerio creó la Modalidad de Educación Rural, que desde su comienzo trabaja relevando las necesidades de las escuelas de alta montaña, entre esas las del invierno. Se ha trabajado en la provisión de salamandras y caloventores, en la provisión en general, el cuidado y control de estas escuelas”, relató.

Sobre los problemas con el tendido eléctrico que señaló el referente de Sidot, dijo: “en muchas escuelas se ha trabajado a través de Construcciones Escolares con el tema de arreglar las acometidas eléctricas para que puedan funcionar aires acondicionados, estufas y caloventores”.

“Este año ha salido un aprestamiento de $ 118 millones, para trabajar lo que es el tema de reparaciones y acondicionamientos de espacios en las escuelas para el invierno. Además, está en gestión una segunda parte de $ 300 millones, que van a llegar también para estos temas. Nosotros seguimos atentos a las necesidades”, concluyó Romero. (Producción periodística: Joel Katz)