La industria y la profesión periodísticas viven un proceso de extraordinaria transformación impulsada por las novedades tecnológicas. Cambian las formas de consumir información y con ello la manera de producirla. En medio del vértigo y la incertidumbre, la Academia Nacional de Periodismo preparó una serie de recomendaciones apoyadas en pilares inalterables del oficio. Postulados útiles para quienes se inician en él, aquellos que ya tienen un recorrido pero son asaltados por dudas e incluso para las audiencias interesadas en conocer los criterios adecuados para elaborar y difundir noticias.

Creada en 1987 y presidida actualmente por Joaquín Morales Solá, la Academia tiene entre sus funciones impulsar la práctica del periodismo fundada en principios éticos.

Los puntos de la guía son los siguientes:

1. La viga maestra del periodismo profesional, independiente, ejercido de manera honesta, es una información basada en la verdad, especialmente en los temas de interés público.

2. El rol del periodismo en la democracia del siglo XXI es informar, opinar, y hacer rendir cuentas a todos los poderes. La información es un derecho, no una mercancía.

3. El periodista debe resguardar su independencia frente a los gobiernos de turno, otros poderes, las empresas privadas y sus propias audiencias.

4. Se recomienda distinguir la información de la opinión, incluso en las redes personales del periodista.

5. Las noticias deben estar separadas claramente del contenido esponsoreado por empresas, partidos políticos o particulares.

6. La libertad de expresión tiene una limitación de hierro: no incitar al odio ni a la violencia, de modo que deben evitarse las agresiones verbales o escritas.

7. El periodista debe atribuir siempre la información, ya sea que se trate de personas que declaran dando su nombre y apellido “on the record”, a fuentes de información (off the record) o a pruebas documentales.

8. Los errores deben ser corregidos e informados a las audiencias lo más rápido posible.

9. El secreto profesional está protegido por el artículo 43 de la Constitución, no como un privilegio personal sino por su función en beneficio del derecho de la ciudadanía a ser informada de manera fidedigna, especialmente cuando se trata de información que los poderes intentan ocultar.

10. Antes de dar a conocer la información, se debe recurrir a la persona/s o entidad/es acusada/s de participar de un delito o de una acción que puede suscitar escándalo para que den su visión de los hechos.

11. Deben evitarse los comentarios sexistas, racistas y los prejuicios de cualquier tipo; al igual que las generalizaciones que afecten a personas por su etnia, nacionalidad, ideología, religión, sexo, educación o condición económica, o que se basen en prejuicios de cualquier otra índole.

12. El periodismo profesional rechaza el plagio, los sobornos, las extorsiones y otras prácticas similares. Ningún periodista debe aceptar pagos, retribuciones, dádivas ni privilegios que pudieran influir en el contenido de su trabajo.

13. La búsqueda de primicias no justifica poner en riesgo la vida de una persona, entrometerse en el trabajo de la Policía en una toma de rehenes, ni obstaculizar la labor de los jueces de manera deliberada.

14. Los periodistas darán cobertura a las noticias de interés público de una sociedad democrática. Las personas públicas están sometidas a un mayor escrutinio, pero sus vidas privadas sólo serán de interés cuando afecten al bien común, al uso de los recursos del Estado, a la vida de otras personas, de manera directa o indirecta, o cuando ellas mismas las expongan.

15. En toda noticia se respetará el principio constitucional de inocencia de las personas hasta que el fallo confirme la culpabilidad. No se publicarán fotos ni nombres de menores de edad vinculados a causas judiciales.

16. El uso de cámaras, micrófonos ocultos u otros métodos no convencionales para lograr datos u obtener testimonios puede ser utilizado sólo cuando se viera involucrado un bien o valor público mayor al derecho a la intimidad de las personas; y, además, cuando se hayan agotado los métodos convencionales de búsqueda de información.

17. Las fotografías y los videos deben ser auténticos. Si se realiza un montaje con fines ilustrativos se debe explicitar claramente que se trata de una recreación.

18. Los periodistas deben dar a los datos que les lleguen a través de las redes sociales u otros canales digitales el mismo tratamiento de verificación y contrastación que aquellos surgidos de las fuentes tradicionales de información.

19. Las buenas prácticas periodísticas se recomiendan no sólo para la tarea que los periodistas realizan en los medios sino también para la actividad que desarrollan en sus propias redes sociales.

20. Es obligación de los periodistas respetar las leyes y el sistema que fundamenta y protege nuestra profesión, la democracia republicana, garantía del pluralismo y el respeto a las minorías. Un debate democrático es el que admite la pluralidad de voces y miradas que conviven en una sociedad.

Además de su presidente, son miembros de la Academia José Claudio Escribano, Jorge Fontevecchia, Beatriz Sarlo, Nelson Castro, Hugo Alconada Mon, Marcelo Longobardi, José Ignacio López, Daniel Dessein, Fernán Saguier, María O'Donnell, Ricardo Kirschbaum, Fernando Sánchez Zinny, Silvia Naishtat, Alberto Munin, Gustavo González, Roberto Guareschi, Miguel Wiñazki, Julián Gallo, Nora Bär, Antonio Requeni, Mariano Grondona, Hinde Pomeraniec, Osvaldo Granados, Héctor Guyot, Daniel Santoro, Norma Morandini, Héctor D'Amico, Fernando Ruiz, Roberto García, Alicia de Arteaga, Ernesto Tenembaum, Fernando Bravo, Santo Biasatti, Eduardo Fidanza, Eduardo Van der Kooy, Jorge Halperín, Enrique Maceira y Carlos Reymundo Roberts.