Nuevo entrenador, nueva ilusión. La “era Frontini” se inició de la mejor manera en La Ciudadela, ya que San Martín de Tucumán derrotó por 2-0 a uno de los equipos más fuertes del ascenso. Patronato llegaba entonado por su éxito en la Copa Libertadores, pero se encontró con un "santo" que fue pura determinación y lo venció con goles de Emanuel Dening y Agustín Colazo. ¿Cómo fue el rendimiento de cada uno de los jugadores?

Darío Sand (6): salvo una salida en falso, transmitió seguridad en cada intervención.

Ismael Quilez (6): en la marca estuvo sólido, pero le costó ser salida y pasar al ataque con claridad.

Juan Orellana (6): mucha actitud y precisión para cortar lejos del área. Cometió una falta brusca, producto de la vehemencia.

San Martín de Tucumán: Frontini se fue feliz, pero sabe que deben mejorar

Franco Meritello (5): en el primer tiempo estuvo errático. En el complemento no se complicó.

Nahuel Banegas (7): otra actuación correcta. En defensa ganó siempre y pasó al ataque con criterio.

Brian Andrada (7): fue el más incisivo. Buen cambio de ritmo y lúcido con la pelota en los pies.

Gustavo Abregú (6): parado como único “5” mostró entrega. “Raspó” y estuvo preciso en los pases.

Leonel Bucca (6): corrió todo el tiempo. Mucha voluntad, pero a veces muy apresurado.

Gervasio Núñez (5): tuvo algunos destellos de calidad, pero lo hizo a cuenta gotas. Le falta ritmo.

Nicolás Moreno (5): hizo el gasto arriba, pero casi nunca logró acercarse a la zona de “fuego”.

Emanuel Dening (6): la voluntad de siempre. Abrió el camino de la victoria al anotar de penal, pero luego erró un “gol hecho”. Inquietó siempre a la defensa rival.

Los que ingresaron

Enzo Martínez (-): entró para aprovechar el contragolpe. Alternó buenas y malas.

Agustín Colazo (-): tuvo dos. En una no controló bien; en la otra resolvió de manera perfecta.

Iván Molinas (-): gran asistencia en el 2-0.

Axel Bordón (-): casi no entró en juego

Ulises Vera (-): jugó poco tiempo para ser evaluado.