Kaidú de Paula Pérez Alonso, publicada por TusQuets, fue seleccionada ganadora del Concurso Sara Gallardo 2021.

Es la historia de Aína, novia de Juan quien tiene un perro, Kaidú, el que va a modificar la vida de esta mujer. En el transcurso de los días, ella irá desarrollando una atracción, un amor profundo, casi excesivo, por el animal. De a poco se va encontrando con este otro, que a la vez será el protagonista, el centro de su vida, y el que va a generar ese halo de sentidos que gesta extrañeza, a la vez que opera desde un realismo de lo cotidiano que simultáneamente parece querer escapar de esos registros realistas para acampar en lo ambiguo: ¿podríamos llamar absurdo, sentirse enamorada de un perro?

En un contexto de cambios culturales, en el que se cuestionan identidades de género, el binarismo, y otros, se intenta quebrar con ciertas estructuras mediante esta historia construida con transparencia, intensa, moderada, emotiva y dúctil; capaz de concebir reflexiones sobre mandatos culturales tradicionales, a fin de encontrar un perfil sobre uno mismo, mediante la liberación de pulsiones vitales, sin reprimirlas, que actúan como otras formas de percibir el mundo.

Un texto polisémico que en su fragmentariedad parece despojarse de la unidad pero se presenta como un todo; genera espacios y tiempos que se cruzan con los viajes de Juan por el mundo, lo que funciona como puente con el Otro. Las culturas orientales; las teorías sobre la evolución de las especies de Darwin, que implicaron cambios de paradigmas, ingresan al texto para reflexionar, no solo, sobre la variedad de las especies, sino para explicar que algunos comportamientos de los animales son muy cercanos a los del hombre, más de lo que suponemos.

El nombre, Kaidú vinculado a la Mongolia, desprende la curiosidad a la vez que lo inquietante. Los viajes y las investigaciones de Juan, abastecen el camino hacia una apertura mayor que no se reduce a la relación con un perro, sino que funcionan como una cadena rizomática donde el mundo se ofrece a través de los fragmentos, como conocimientos diversos que equivalen a otras verdades y percepciones del ser y del universo.

En Kaidú no hay efectos perversos del comportamiento humano; hay una relación donde las emociones están en crisis; se consideran posibles fragilidades del acontecer fundamental del hombre que giran en torno a diversos interrogantes y sus búsquedas. Una nouvelle de la exploración sobre las relaciones humanas, con un estilo singular.

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