En el juicio por el crimen del padre Oscar Juárez se deberá resolver otra cuestión: quién se quedará con los U$S 60.000 que aparecieron en medio de la investigación y que, según la teoría de la ex fiscala Adriana Giannoni, podría haber generado el homicidio del sacerdote.

“Recuerdo que al día siguiente de tan lamentable suceso, al inicio de la jornada laborable, me esperaban los hermanos del sacerdote Juárez acompañados por el abogado Juan Andrés Robles. Tenían en sus manos un sobre de papel madera para entregarlo”, explicó la ex fiscala Adriana Giannoni. “El sobre contenía una gran cantidad de dólares que, según sus dichos, habían sido entregados por el sacerdote días antes de que fuera asesinado”, añadió.

La ex investigadora ponderó la actitud. “Demostraba la disposición de la familia y del Arzobispado de esclarecer el hecho, ya que al poner a conocimiento y disposición de la Justicia la existencia de los dólares, se abrió una nueva línea de investigación, hasta ese momento desconocida”, comentó en la entrevista con LA GACETA.

Giannini destacó que los billetes de la moneda norteamericana fueron contados por el actuario de la fiscalía y reservados en la caja fuerte de su oficina. “Luego se abrió una caja de seguridad en un banco para preservar que sean los mismos billetes que los entregados por la víctima a los fines de proteger la evidencia”, comentó.

Al ser interrogado, José Juárez declaró que el párroco de San Martín de Porres se lo había entregado para que lo guardara la última vez que lo vio con vida. Según habría comentado, la víctima habría dicho que eran los ahorros de toda su vida y que los utilizaría cuando se jubilara.

Otro punto

Sin embargo, Giannoni se topó con otra situación. Robles presentó documentación para respaldar que ese dinero pertenecía a la Iglesia. Según comentó en esa oportunidad, el recientemente fallecido monseñor Alfredo Horacio Zecca, después de haber vendido una propiedad del Arzobispado, le entregó al menos U$S 50.000 para la compra de un equipo de aire acondicionado para el templo. Algunos feligreses aseguraron que sí se había hecho esa inversión, pero con donaciones. Estimaban que los billetes de la moneda norteamericana habían sido destinados a otras obras.

“El dinero fue entregado al padre Juárez, pero como no hubo ninguna rendición, no podemos determinar si el origen es de lo que recibió de las autoridades eclesiásticas o los ahorros de toda su vida. En el debate se terminará de resolver este tema”, indicó Robles que representa a la familia de la víctima.

Más allá de todas las dudas, lo cierto es que hubo cierta informalidad en el manejo de esos fondos. En los libros contables de la parroquia, que eran manejados por Norma Lelia Velárdez, madre del acusado Jorge Leonardo Herrera, tampoco habrían estado registrados. Además, el efectivo iba de un lado a otro. Se confirmó que el padre le pidió a la progenitora que lo guardara en su casa y después, se lo entregó a su hermano para que hiciera lo mismo.

La fiscala Giannoni no entregó el dinero a ninguna de las partes, sí dispuso que se los guardara en una caja de seguridad hasta que se definiera a quién pertenecía. “Todavía no recibí ninguna instrucción para definir quién debería quedarse con esos fondos”, finalizó Robles.

Declaraciones

Denunciaron al arzobispo Sánchez

“La Justicia produce paz. Cuando hay justicia hay paz, cuando hay injusticia hay violencia, agresión”. Fueron las palabras que emitió el arzobispo Carlos Sánchez en el programa “Panorama Tucumano” cuando se le consultó su opinión sobre el inicio del juicio por el crimen del padre Oscar Juárez. 

Julio Leonardo Herrera, padre del acusado del crimen, presentó una denuncia penal en contra del religioso, al considerar que sus palabras ponían en riesgo la seguridad pública en la provincia y la del acusado. La demanda se presentó en la Unidad Fiscal de Decisión Temprana que deberá definir si le da curso.