Los ex agentes de la Policía de Minneapolis J. Alexander Kueng y Tou Thao fueron condenados a prisión por su participación en el asesinato de George Floyd.

Los agentes habían sido declarados culpables en febrero de violar los derechos civiles de Floyd, mostrando "indiferencia deliberada" hacia sus necesidades médicas y no interviniendo para detener el uso de "fuerza irrazonable" por parte del agente Derek Chauvin.

Los abogados de Lane pidieron rebajar su condena por haber sugerido colocar a Floyd de lado y reanimarlo. El agente se declaró culpable en mayo de cargos de complicidad en homicidio en segundo grado, por un acuerdo de culpabilidad que le hará pasar tres años en la cárcel.

Por otra parte, Kueng y Thao serán juzgados a finales de octubre por cargos de homicidio imprudente.