El caso de Alessia Pifferi causó conmoción en Italia. La mujer dejó a su hija de 18 meses sola en su casa durante seis días y cuando regresó la encontró sin vida.

Tras ser detenida, Pifferi expresó que no era la primera vez que hacía algo así. Sus ausencias eran cada vez más recurrentes y prolongadas: primero unas pocas horas, luego dos o tres días. Hasta que el jueves 14 de julio, antes de las 19, Pifferi bañó y cambió a su hija por última vez.

Esa noche se dirigió hasta Leffe, un pequeño pueblo de Bérgamo, para encontrarse con su pareja. A él le dijo que Diana había quedado bajo el cuidado de su hermana.

Recién el miércoles 20 de julio, cerca de las 10, Pifferi volvió a ingresar a su vivienda. Diana se encontraba en el catre, sin vida y deshidratada. 

La Justicia aún espera el examen toxicológico y la autopsia. La sospecha es que Diana pudo haber sido dormida con algún fármaco, situación que complica aún más a Pifferi.