El Gobierno presentó el proyecto para gravar la renta inesperada de aquellas empresas que aumentaron sus ingresos por el aumento de precios debido a la invasión a Rusia y Ucrania, medida que ya fue adoptada por otros países.

En Italia, este año se aprobó un impuesto a la renta inesperada aplicable a empresas energéticas y las autoridades esperan recaudar 4.000 millones de euros.

El mismo se aplica a empresas que hayan aumentado sus ganancias entre octubre del 2021 y marzo del 2022, al menos en 5 millones de euros, y se les aplica una tasa del 10%. Igualmente, semanas atrás anunciaron la intención de aumentarla a un 25%.

Otro de los países que busca implementar un proyecto similar es Reino Unido: el primer ministro Boris Johnson anunció que tiene la intención de gravar la renta inesperada con una tasa del 25% a las compañías energéticas productoras de gas y petróleo

Según lo difundido recientemente por el gobierno británico, se espera recaudar 6.300 millones de dólares que se destinarán a subsidiar a 8 millones de hogares. Al igual que en Italia, una de las principales consecuencias de la guerra está relacionado a la energía.

Por su parte, Grecia anunció un impuesto del 90% tras identificar US$ 623 millones en ganancias extraordinarias por parte de determinadas empresas.

En Hungría, en tanto, el primer ministro Viktor Orban estableció este mes impuestos extraordinarios en diversos sectores, incluyendo un 10% a los bancos, 25% a importadoras de petróleo y 7% a firmas de telecomunicaciones, con los que espera obtener US$ 2.190 millones.

En Argentina, y según lo explicado por el ministro de Economía Martín Guzmán, la ley alcanzaría a empresas con Ganancia Neta Imponible o Ganancia Contable superior a $1.000 millones y cuya Ganancia Neta Imponible haya crecido en términos reales y que cumplan con una de estas condiciones:

- Margen de ganancia (ganancia contable sobre sus ingresos) en 2022 superior al 10%.

- Aumento del margen de ganancia en 2022 en relación al 2021 de al menos 20%.