PUYO, Ecuador.- Líderes de grupos indígenas de nueve países en la cuenca del Amazonas reunidos en Ecuador pidieron el martes a los gobiernos de América del Sur que detengan las actividades extractivas que dañan la selva y los instaron a respetar los acuerdos y fallos legales que reconocen los derechos de las comunidades sobre los territorios.

Un aluvión en Ecuador deja al menos 14 muertos y 32 heridos

Los gobiernos de la región están incumpliendo sus promesas de proteger a los grupos indígenas, dijeron los representantes de más de 500 pueblos, quienes agregaron que sienten una falta de respeto cuando no son consultados sobre la explotación de proyectos petroleros y mineros en sus territorios.

Un terremoto de 7,5 sacudió Perú y el sur de Ecuador

“Estamos exigiendo a la humanidad que nos apoye en nuestra lucha por la vida, por el agua, por las montañas, por nuestra identidad”, dijo José Gregorio Díaz Mirabal, de la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA).

Ecuador: barricadas y policías en las calles

Durante reuniones en Puyo, una ciudad del oriente de Ecuador, donde se realizaron rituales con plantas sagradas, Díaz Mirabal llamó a los gobiernos a respetar las leyes y constituciones de los países en materia de proyectos extractivos.

“Que se haga realidad esa letra”, agregó.

Las comunidades indígenas en la cuenca del Amazonas enfrentan problemas que incluyen derrames de petróleo, deforestación y contaminación de ríos por minería legal e ilegal, todo lo cual afecta negativamente a las personas y la vida silvestre, agregaron los líderes.

Hogar de jaguares, delfines rosados de río, anacondas, monos aulladores y miles de otras especies, al Amazonas, que en algunas partes apenas ha sido tocado por el mundo moderno, es considerado clave por parte de los investigadores para frenar el cambio climático.

En Ecuador, la lucha de las comunidades indígenas contra las actividades extractivas ha cobrado fuerza luego de que la Corte Constitucional del país suspendiera los permisos ambientales de un proyecto minero y ratificara el derecho de las comunidades al consentimiento previo para el desarrollo de proyectos que afecten su forma de vida o estén ubicados en sus territorios. (Reuters)