La “normalidad” es cada vez más una quimera tras la llegada de la pandemia. Nada es “normal” a partir de los primeros meses de 2020, pero lo cierto es que desde entonces -y por suerte- fuimos recuperando espacios, actividades y distintas otras cosas que al menos nos hacen sentir más cerca de ese concepto. La agenda cultural de nuestra provincia es un gran ejemplo en este sentido y el balance que podemos llegar a hacer de este año nos ayudará a confirmarlo. Siempre y cuando tomemos en cuenta dos cosas, claro está: el 2020 y el 2022. Es que el 2021 fue un gran año para las actividades culturales si miramos en perspectiva. Es decir, teniendo en cuenta lo que pasó el año pasado y sabiendo que la expectativa se mantiene esperando que el próximo sea aún mejor.

Tras un 2020 prácticamente en blanco, el regreso de los espectadores presenciales en la mayoría de los espectáculos significó un alivio para todo el sector. “Arrancamos la temporada en enero (era la primera vez que lo hacíamos) y tuvimos 76 espectáculos con más de 100 funciones. Primero con un aforo de 550 personas, luego de 750 y ahora de 1.557, que es la totalidad de nuestra sala. En su gran mayoría, hemos tenido una gran respuesta del público. Por ende tuvimos muchísimo trabajo y respetando totalmente las medidas sanitarias. Nos hemos obsesionado con ellas”, detalló Raúl Armisen, director del Teatro Mercedes Sosa.

“El balance de 2021, comparado con 2020, es lógicamente muy positivo porque venía de estar todo cerrado. En marzo nos abrieron de nuevo, después tuvimos que volver a cerrar, respetar aforos y otras restricciones, siempre siguiendo el ritmo de la situación epidemiológica de la provincia. Ahora estamos cerrando el año de manera brillante con ‘Spiderman’, que ha sido un impulso para todas las salas del mundo”, agregó Roberto Abdenur, propietario del cine Atlas. Tanto el cine, como el teatro y decenas de actividades en la provinci comenzaron a pedir el pase sanitario, que incluye un esquema de vacunación completa. “Siempre pusimos en primer término la situación sanitaria de Tucumán. La implementación del pase es muy positiva y nosotros vamos a colaborar para que definitivamente superemos esta situación”, destacó Abdenur.

El Ente de Cultura de la Provincia también celebró el regreso de los espectadores, pero su resumen de 2021 pasa también por otros aspectos, según su presidente, Martín Ruiz Torres. “Durante este año, el trabajo del Ente estuvo atravesado por tres ejes de gestión: generar fuentes de trabajo, facilitar el acceso a los bienes y servicios culturales y promover la cultura de la solidaridad”, le explicó Ruiz Torres a LA GACETA. “Nuestros programas anuales (Mayo de las Letras, Septiembre Musical, Festival de Cine, etcétera) generaron la contratación de más de 1.500 artistas. Además, durante la pandemia fundamos el periódico Tiempo de Cultura, producimos íntegramente la ópera film “El teléfono”, publicamos nueve libros de autores tucumanos, inauguramos el Museo Arqueológico a Cielo Abierto Ibatín y el Iramain en Raco, entre varias otras cosas”, detalló la autoridad máxima del Ente.

También dentro del Ente, Adriana Chaya, directora de Medios Audiovisuales, explicó lo difícil que fue para el sector audiovisual todo este período y el alivio de ver que las cosas lentamente volvían a esa “normalidad”. “El sector audiovisual fue uno de los más golpeados por la pandemia. Le ha costado levantarse, pero se está activando. Este último año quisimos poner énfasis en la producción local. Hay muchos proyectos en desarrollo y nos dedicamos a ayudarlos para que sigan adelante y en el futuro puedan concretarse”, explicó Chaya.

Pensando en 2022, con los espectadores ya en las salas desde hace meses, muchas cosas pueden cambiar, pero la llegada de la virtualidad a un espacio como el Festival de Cine Gerardo Vallejo puede que hasta haya beneficiado al sector. “Me parece que a nivel del festival, parte de la virtualidad ya vino para quedarse. Es que lo virtual tiene sus beneficios y uno de ellos es el mayor alcance que tienen las películas. De todas maneras nos iremos adaptando”, comentó Chaya.

Ruiz Torres apuesta por un 2022 ratificando todo lo que se viene haciendo: “el año que viene vamos a profundizar nuestros ejes de gestión. La Argentina de la pospandemia requiere de la generación de fuentes de trabajo genuinas, para lograr el crecimiento del sector en un marco de solidaridad y de inclusión. Y para eso es clave promover las industrias culturales”.

Armisen augura un 2022 un poco más cercano a esa “normalidad” de la que hablamos, pero siempre teniendo presente la realidad que toca vivir. “Creo que va a ser una temporada muy interesante y con espectáculos internacionales para nosotros (Ismael Serrano, un tributo internacional a Michael Jackson, entre otros). Empezará en febrero. Yo soy extremadamente optimista, pero me asusta la realidad sanitaria. Nos tenemos que acostumbrar a esto y cumpliremos todos los protocolos a rajatabla. Es la manera de protegernos a nosotros y a los espectadores”, advirtió el responsable del Mercedes Sosa.

En el Atlas, la sensación es similar. “La expectativa para 2022 es buena, hay una buena cartilla de estrenos. La industria tiene muchas sorpresas guardadas para nosotros -se esperanza Abdenur-. Espero que la situación acompañe y que trabajemos 100% mientras se pueda y así poder recuperarnos totalmente”.