Las autoridades sanitarias de Alemania alertaron este miércoles que Ómicron podría ser la variante dominante en el país en las próximas semanas.

"La tendencia es clara como el agua. Con un tiempo de duplicación (para los casos) de aproximadamente tres días, la nueva variante podría en las próximas una, dos, como máximo tres semanas representar la mayoría de todas las infecciones en nuestro país", afirmó el director de la autoridad sanitaria infecciosa alemana, el Instituto de virología Robert Koch (RKI), Lothar Wieler.

En Alemania, una ola de infecciones causada por la variante Delta, aún dominante, está retrocediendo lentamente, pero los funcionarios dicen que el nivel de casos sigue siendo demasiado alto.

Ómicron ya es la variante dominante en el Inglaterra y Escocia (Reino Unido) y Estados Unidos.

El Gobierno federal acordó ayer con las autoridades de los estados introducir nuevas restricciones antes del 28 de diciembre, para limitar las reuniones privadas a 10 personas, cerrar clubes nocturnos y eliminar el público en los eventos de gran magnitud.

Wieler llamó a mantener precaución antes de esa fecha: la Navidad "no debería ser la chispa que encienda el fuego Ómicron", expresó el experto e instó a los alemanes a reunirse con la menor cantidad de personas posible así como también a evitar viajes innecesarios.

Funcionarios alemanes confían en poder cumplir con su promesa de administrar 30 millones de dosis de vacuna antes de fin de año al tiempo que esperan tener disponibles otros 30 millones de inyecciones para fines de enero.