El primer superclásico con el retorno del público a las canchas tras las restricciones motivadas por la pandemia de coronavirus fue para River.

Ya desde el primer tiempo se plantó como superior a Boca, que tempranamente se quedó con un jugador menos (Marcos Rojo). Julián Álvarez anotó dos golazos de otro partido.

El primero, a los 25 minutos, sirvió para abrir el marcador y brindar tranquilidad. El segundo, a los 43 minutos del primer tiempo, sepultó toda esperanza de Boca, que intentaba arrinconar a River en su área.