Respecto de la carta del lector Fernando Saade, “Próceres, adoctrinamiento y catolicismo” (06/09), el mismo descalifica el pensamiento y el análisis histórico de la lectora Marcela Rodríguez (carta “Adoctrinamiento” de fecha 04/09) y además se erige en dueño absoluto de la verdad de la historia. En su relato cita ejemplos, en su afán de sostener próceres inmaculados y sustraídos de sus características cuestionables y hasta repudiables. Voy a citar dichos de Sarmiento: “la adhesión de los negros dio al poder de Rosas una base indestructible. Felizmente, las continuas guerras han exterminado ya la parte masculina de esta población”. Otro: “Llego feliz a esta Cámara de Diputados donde no hay gauchos, ni negros ni pobres. Somos la gente decente”. Otro: “a los indios se los debe exterminar, su exterminio es providencial y útil, sublime y grande. Sin ni siquiera perdonar al pequeño que tiene ya el odio instintivo al hombre civilizado”. En cuanto a Roca, otro de los próceres sacrosantos del lector Saade, fue el que masacró a poblaciones de hermanos originarios, tan argentinos como él. Despiadado, sanguinario y cruel, los aniquiló para beneplácito de la corona británica y de sus amigos, la naciente y rancia oligarquía, la misma que padecemos hoy, a la que repartió cientos de miles de hectáreas quitadas a los indios y los entregó en servidumbre esclava. Tanto hombres como mujeres y niños. En cuanto a la Iglesia Católica, el lector mencionado hace negacionismo crítico de los horrores cometidos por esta a lo largo de más de 2000 años: la guerra “santa”, la también “santa” Inquisición que con torturas abominables y quema de personas vivas llevó a cabo un genocidio atroz en nombre de Dios; la ayuda a los nazis fugitivos para que pudieran huir al final de la guerra y la colaboración con los golpes militares en Sudamérica que sesgaron las vidas de miles y miles de seres humanos. Incluida nuestra Patria. Cuando a la historia la escriben los que ganan es porque hay otra historia (lo dice con acierto una canción). Bienvenido sea el revisionismo porque nos invita a comprender y aprender que la historia no es rígida ni estática. Su principal característica es la dinámica. Y la verdad no es patrimonio exclusivo de nadie.
Francisco Centurión
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