“Tenía cierto temor cuando retomamos los ensayos. Pensaba que por haber parado tanto tiempo los músicos habrían perdido el nivel que da la actividad permanente. Sorprendentemente encontré que no sólo estaban en buenas condiciones técnicas y que no habían bajado el nivel, sino que además están muy entusiasmados y que se cuidan muchísimo para volver a la actividad presencial. Es muy gratificante verlos tan responsables, valorando su trabajo musical, su pasión”.

Gustavo Guersman habla de sus dirigidos, los integrantes de la Orquesta Juvenil de la UNT, con el tono de un padre comprometido. El XXII Julio Cultural Universitario empieza a despedirse hoy, a las 20, en el teatro San Martín (avenida Sarmiento 601) con “Ahora... música”. Desde el nombre, el concierto que propone el director al frente de la formación apela a celebrar la música compartida en vivo.

Programa y protocolos

Mientras describe cómo será el concierto, Guersman va dando cuenta del armado de un programa que consensúa una música que es viable para tocar con la logística de los protocolos.

“Abrimos con dos flautistas que tocan a dúo. Después entran las cuerdas y hacen dos obras: el Andante festivo, de Jean Sibelius, y la Suite Holberg, de Edvard Grieg. Salen las cuerdas y entra un quinteto de vientos, que va a tocar una obra de la compositora francesa Hedwige Chrétien. Se van ellos y vuelve a entrar la orquesta, ya con el chispeante Divertimento, de Wolfgang Amadeus Mozart. Entonces llega Pablo Bemsch, que interpretará con nosotros dos de las arias más famosas de Georg P. Haendel: ‘Ombra mai fu’ y ‘Lascia la spina’, que es la misma partitura que ‘Lascia ch’io pianga’, pero con otro texto. Son obras que habitualmente cantan los contratenores y las mezzosopranos. Pablo tiene una voz muy particular, muy dulce (ver “Un solista de lujo”). El concierto terminará con las cuerdas, interpretando la Suite Capriol, de Peter Warlock”, enumera.

PROTOCOLO. Como muchas orquestas del mundo, el director y los músicos trabajan con barbijo. LA GACETA / FOTO DE JUAN PABLO SÁNCHEZ NOLI

Desafío

“Ha sido un desafío diseñar un programa porque no sabíamos con cuántos ensayos íbamos a contar o si se suspendía alguno. Finalmente se armó un concierto interesante, donde intervienen 35 músicos en grupos separados (en burbuja) de cuerdas y de vientos, y además, con tiempo justo en escena, no más de una hora y 10 minutos de música”, comenta.

Guersman adelanta una puesta en escena diferente: “vamos a tocar parados (a excepción de los chelos). Por supuesto que a más distancia de lo normal y con barbijo. Es muy interesante, da una nueva sensación visual y hasta auditiva”.

Música sanadora

La vuelta a la presencialidad para el director “es extraña, como este tiempo que estamos atravesando, en que uno trata de gestionar la incertidumbre constantemente. Pero hay una cosa que no es incierta, y ella es la música, porque fue y será siempre sanadora para el que la ejecuta y para el que la escucha. Hablo de la música en su estado puro, más allá de cualquier cotillón que tenga que ver con la gestión. A mí en particular me moviliza mucho”.

Tiempos pandémicos

Respecto de la pandemia, Guersman reflexiona acerca de un momento en que parece difuminada un poco la sensación del tiempo.

“No se sabe bien cuándo han sucedido las cosas. El último concierto que hicimos con la Juvenil fue en 2019”, recuerda, y entre otras cosas lamenta haber perdido (tal como otros colegas músicos) tras dos cancelaciones -en 2020 y este año- una invitación que había recibido para dirigir la Orquesta Filarmónica de Sofía, en Bulgaria.

De todas maneras rescata “el hecho de que lo poco que pueda suceder de las acciones normales es mucho; hay que agradecer estar sanos y poder hacer algo”. El director adelanta cómo sigue la agenda de la Orquesta Juvenil: “tienen tantas ganas de tocar que vamos a repetir este concierto el martes, incorporando otras obras, en la Parroquia Cristo Rey, porque hay un grupo grande de músicos que quieren tocar como solistas y que a este concierto no pudieron entrar”. Es que las condiciones sanitarias se respetan a rajatabla, distancia y cubrebocas mediante.

Entrada libre

Para el concierto de hoy la entrada es libre y gratuita, hasta cubrir el aforo reducido de la sala, por lo cual se recomienda asistir 30 minutos antes para el ingreso. Se pide la colaboración de leche en polvo o larga vida, en el marco de la campaña Universidad Solidaria.