El Gobierno nacional anunció ayer que, ante el avance de la inflación, se pagará en agosto un bono de $5.000 a jubilados y pensionados. Pero el pago extra no será para todos.
Según informó el Gobierno, el bono será cobrado por los jubilados y pensionados que tienen ingresos de hasta dos haberes mínimos ($46.130), un universo que alcanza a seis millones de personas y representa al 83% del total de quienes cobran haberes previsionales.
Es decir que, quien percibe una jubilación mínima ($23.065), en agosto cobrará un total de $28.065. Asimismo, en septiembre se otorgará un nuevo aumento trimestral por movilidad que actualizará las jubilaciones, pensiones y asignaciones familiares según la evolución de la recaudación y los salarios, tras los incrementos incorporados en marzo (8,07%) y en junio (12,12%).
"No queremos que los jubilados sean la variable de ajuste ante los aumentos de precios. Muchos me criticaron cuando dije que entre bancos y jubilados elegía a los jubilados, y entre salud y economía elegía salud, porque elegía la vida antes que la muerte, y no me arrepiento porque voy a luchar todos los días para que vivan con más salud y vivan bien", dijo Alberto Fernández durante el anuncio de ayer, en la localidad de Lomas de Zamora, junto al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y otros funcionarios.