A las 19 cerraron las mesas de votación en el balotaje para escoger gobernadores de 13 de las 16 regiones de Chile.

La elección estuvo marcada por una baja participación ciudadana, menor a la de la primera vuelta del 15 y del 16 de mayo, cuando solamente votó un 43% del padrón electoral.

A pesar de que todas las autoridades y políticos llamaron a participar de la elección, se vieron pocas filas en los centros de votación.

La región con mayor población e importancia que está en juego es la metropolitana, donde el oficialismo no tiene candidatos, ya que tanto Claudio Orrego de la Democracia Cristiana (Unidad Constituyente) y Karina Oliva del partido Comunes (Frente Amplio) son opositores.

En las otras 12 regiones con elecciones, solamente ocho tienen candidatos oficialistas y las tres que ya definieron su gobernador en primera vuelta tendrán gobernador opositor, lo que marcaría un mapa político difícil para la coalición de derecha que gobierna el país trasandino.

Según difundieron voceros del Servicio Electoral chileno, alrededor de las 21.30 se observaría una tendencia clara de los resultados.

Esta es la tercera elección que vive Chile durante la pandemia del coronavirus, que ha provocado casi 1,5 millones de contagios y más de 30.000 muertes.