La Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) se reunió el jueves último con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, e hizo hincapié en la situación actual del sector mercantil. En el encuentro, los representantes de la entidad privada fijaron la atención en los "efectos de la pandemia de coronavirus y en las restricciones asociadas, que se sumaron a una crisis macroeconómica iniciada hace tres años y a un estancamiento de casi 10”. Además, advirtieron que se registra una la “elevada informalidad en el país, lo que implica una competencia desleal para aquellos que cumplen con sus obligaciones tributarias y previsionales”.

Hoy, en la Federación Económica de Tucumán (FET) ratificaron esta último planteo y apuntaron a un mercado informal marcado, no sólo por los vendedores callejeros, sino también por los conocidos “showrooms”. “En Tucumán hay un incremento de la informalidad, y va de la mano de muchas razones, entre ellas, que cada vez hay más impuestos que recaen sobre lo formal. Ello origina el traspaso a la informalidad”, remarcó el titular de la cámara provincial, Héctor Viñuales.

El dirigente describió este escenario al hablar de la proliferación de los llamados manteros y de la venta de ropa y calzados a través de las redes sociales o en depósitos “no declarados” -espacios adaptados para la comercialización, como viviendas-.  “Los comercios se cierran y pasan a la modalidad de los 'showrooms' y otros canales informales”, enfatizó.

“Los precios bajos de los productos son el gran incentivo. Sobre ellos no recaen los impuestos, que en el sector formal representa casi el 50% del precio al consumidor”, añadió. “Claramente, tiene que ver con la presión fiscal, por los altos impuestos”, insistió.