Los padres de adolescentes que vuelven a clases presenciales esta semana mostraron expectativas e inquietudes de cara al ciclo lectivo 2021. Recuperar el tiempo perdido el año pasado y que sus hijos se entusiasmen de nuevo con libros es lo que más les preocupa. También que se cumplan los protocolos de seguridad para evitar contagios de covid-19.

Mucha tarea

“A mis hijos les costó la virtualidad. Renegaban porque les daban mucha tarea por classroom y no les gustaban las clases por zoom. Ellos quieren volver a la escuela más que nada para ver a sus amigos, pero también en parte estaban cómodos porque en casa no tenían que estudiar tanto como cuando van al aula”, comentó María Vacca, mamá de Juana, de 13 años, y de Lucas, de 16.

Entusiasmo

“Como mamá una tiene temores porque el virus está, pero es tanto el entusiasmo que tienen los chicos por ver a sus compañeros y por volver de manera presencial que estamos dispuestos a que lo hagan. Por más que no sea la misma presencialidad de antes, creo que va a ayudar mucho”, sostuvo Teresa Herrera, mamá de José Ignacio, que pasó a tercer año del San Ignacio de Loyola, y de Juan Martín, que tiene 13 años y va al Nueva Concepción.

Se trabajó más

Silvina Diez del Valle, que es docente y mamá de dos adolescentes, está a favor de la vuelta a la presencialidad. “A veces se habla de que los docentes no hacían nada y que los chicos no aprendían, pero en realidad yo siento que se trabajó mucho más. Había que estar todo el tiempo conectados. Siento que mis hijos y los chicos en general se adaptaron bien con el tema de la tecnología, lo tienen más naturalizado”, opinó.

Cuidados desde la casa también

Gabriela Alé, mamá de Ana y de Julieta (alumnas del Pablo Apóstol) expresó: “estamos esperando el arranque de las burbujas y creemos que todo va a estar bien, las chicas están muy entusiasmadas, tenemos las expectativas de que esto se vaya normalizando cada vez más”. En su opinión, que se cumplan los protocolos de seguridad (distanciamiento y uso de barbijo) no es responsabilidad sólo de los colegios y escuelas. “Los cuidados vienen desde la casa también -opinó-. Sé que no es fácil poner en marcha una institución, por eso confío en que todos nos vamos a poner las pilas, padres y colegio”.