Con escuelas, tribunales y museos cerrados, nieve apelmazada en aceras y bloqueando calles y avenidas, Madrid y el centro de España permanecen paralizados hoy a dos días de una histórica tormenta de nieve.

Casi 36 horas después del cese de las precipitaciones, las más voluminosas en 50 años, el gran peligro ahora es el hielo, ya que a la nevada le sucederá esta semana una ola de frío.

La helada multiplica el riesgo de resbalar por la calle, y de las cornisas de los edificios caen continuamente bloques de nieve.

"La nieve va a continuar tiempo en las calles de Madrid con estas temperaturas" bajo cero, advirtió el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, según reprodujo la agencia de noticias AFP.

Y aunque la Unidad de Emergencias Militares (UME) despejó algunas arterias centrales, la mayoría de calles siguen siendo muy poco transitables en Madrid, donde puede observarse hasta medio metro de nieve en muchas de ellas.

Muchos árboles cedieron al peso de la nieve acumulada, y en toda la ciudad pueden verse ramas tiradas en las calles.

En la región de Madrid, las escuelas y universidades estarán cerradas hasta mañana, al igual que los tribunales de justicia, museos, centros culturales y bibliotecas.

Las autoridades regionales dicen que distribuyeron 277 toneladas de sal a diferentes municipios de la zona, y esperan recibir 3.500 toneladas más.


Los autobuses públicos siguen sin circular en Madrid, aunque el metro sí lo hizo, sin interrupción, por segunda noche consecutiva.

Los trenes suburbanos (de cercanía) vuelven a circular en algunas líneas, aunque con menos frecuencia. La reanudación también está siendo progresiva en el aeropuerto internacional de Madrid, Barajas.

Los trenes de alta velocidad también se vieron afectados, y este lunes aún no funcionaban las rutas entre Madrid y ciudades como Barcelona, Salamanca o Zaragoza.

Las autoridades madrileñas pidieron al gobierno español la declaración de zona de catástrofe, aunque el ministro de Transportes, replicó que eso se estudiará "una vez que disminuya el temporal y podamos hacer una evaluación de los daños".

El temporal, bautizado Filomena, provocó también fuertes lluvias en otras regiones de España y causó al menos tres muertos.