Rosario siempre queda cerca para Lionel Messi. No importa el lugar donde se encuentre ni el momento. Cada vez que puede se sube al avión para visitar a su familia y sus amigos, esos que estuvieron junto a él cuando todavía no había llegado a la cima del fútbol mundial. Horas después de anotar el gol 644 con la camiseta de Barcelona y superar la marca que hasta la semana pasada estaba en poder de Pelé, “Lío” se subió a su avión privado y se instaló en su ciudad natal, donde celebrará la Navidad.

Los botines del récord

En este momento de su carrera, Messi necesita el cariño de sus seres queridos y de los argentinos. Tras su llegada al aeropuerto, algunos hinchas se acercaron para saludar a su ídolo, y él se aceptó con una amplia sonrisa sacarse fotos.

Su esposa Antonella Roccuzzo y sus hijos Thiago, Ciro y Mateo lo esperaban en una camioneta Lange Rover negra estacionada junto al edificio del aeropuerto, a la que Messi subió y condujo hasta la casa de sus suegros, en el Country Kentucky, de la ciudad de Funes, ubicada a 15 kilómetros al oeste del centro de Rosario. En ese barrio cerrado también tienen sus casas algunos jugadores de Newell`s -Maximiliano Rodríguez y Pablo Pérez-, Gabriel Heinze y Javier Mascherano.

Antonella envió un mensaje en su cuenta de Instagram que acompañó con una foto navideña en la que aparece junto a su esposa y sus tres hijos. “Les deseamos una Navidad llena de amor y salud. Feliz Navidad”, escribió en la publicación.

Messi pasará una celebración en Argentina y luego volverá a Barcelona, porque el 29 de diciembre enfrentará al Eibar en el Camp Nou.

La actividad en España casi no se va a detener pese a las fiestas de fin de año. Ayer, Real Madrid venció 2 a 0 a Granada (goles de Casemiro y Benzema), lo que le permitió mantenerse en el primer puesto de LaLiga junto con Atlético de Madrid, ambos con 32 puntos. Villarreal y Real Sociedad tiene 26. Barcelona está quinto, con 24.