Las calles están cortadas; la plaza Independencia, cerrada. De fondo se ve a varios policías custodiando el lugar. Bastón de mando en mano y con su barbijo, Juan Manzur caminó desde la Casa de Gobierno hasta la iglesia Catedral para participar del Solemne Tedeum, del cual es celebrada por el arzobispo de Tucumán, monseñor Carlos Alberto Sánchez. 

El mandatario lo hizo en compañía de su esposa, Sandra Mattar, y junto a diferentes funcionarios del gobierno provincial.

A diferencia de lo que sucedió con los actos del 25 de Mayo, esta vez el gobernador estuvo acompañado por el vicegobernador, Osvaldo Jaldo; su mujer Ana María Grillo; el presidente subrogante de la Legislatura, Regino Amado; y el legislador Gerónimo Vargas Aignasse. Sin embargo, una vez más, fue algo atípico ver al gobernador dirigiéndose por las calles vacías del centro, sin público. 

LA GACETA / FOTOS DE ANALÍA JARAMILLO

Sólo un nutrido grupo de periodistas siguió los pasos de Manzur hasta el templo, donde se celebra el Tedeum.