Desde que arrancó la cuarentena las distancias dejaron de medirse en millas aéreas para pasar a delimitarse en apenas unos metros cuadrados. Es así que los viajes turísticos pasaron a ser una prioridad de consumo para la etapa posterior a la pandemia.
Así lo registró un sondeo a 1.417 argentinos difundido por la consultora de turismo y economía Singerman & Makón. “Más de la mitad de los encuestados manifestó que la situación de aislamiento social generó un ánimo mayor de realizar un viaje. Efecto que fue aún mayor en los grupos más jóvenes. Sin embargo, el miedo al contagio y la pérdida de poder adquisitivo atentan sensiblemente sobre las decisiones”, precisó el economista Pablo Singerman a la agencia de noticias Télam.
En cuanto a los sellos del pasaporte, la encuesta online destacó que los destinos más elegidos se inclinan por el interior de nuestro país. Y que apenas un tercio prefiere el extranjero. La situación sienta un cambio en las respuestas recurrentes de otros años, períodos en que la novedad de los intercambios culturales funcionaba como un atractivo extra para los viajantes.
Por otra parte, en lo que respecta a la recuperación del rubro, las expectativas de viajes se mantienen hacia finales de 2020 y principios de 2021. A lo que se suma que más del 50% de los encuestados debió reprogramar un viaje directamente para el año próximo.
“Las tendencias sobre quién será el nuevo turista muestran que las personas planean viajar con su grupo familiar, utilizando transporte aéreo o vehículo propio como principales medios de transporte. El motivo central serán las vacaciones”, explicó Singerman. Lo importante será que el país de recibida garantice las medidas de seguridad sanitaria pertinentes.
Con sello local
Entre los consultantes que prefieren hacer turismo interno hay un comportamiento dispar en relación con la distancia, ya que los turistas prefieren por igual la corta, media o larga distancia.
Las regiones más elegidas en Argentina fueron la Patagonia y Buenos Aires, con San Carlos de Bariloche y Mar del Plata (respectivamente) como los sitios de referencia para concretar las escapadas.
En cambio -entre la gente que prefiere visitar el exterior- el continente favorito es Europa. En espacial al tener en cuenta España o Italia. En segundo lugar está América Latina (con Brasil a la cabeza) y después América del Norte (precisamente, Estados Unidos).
“Esto evidencia que pese a haber sido el foco de contagios durante la pandemia, los destinos internacionales más tradicionales continúan manteniendo su atractivo para los turistas argentinos”, precisó el consultor.
Ahorros y kilometraje
En lo estrictamente económico, cerca del 50% de los encuestados sostuvo que la crisis disminuyó o extinguió su nivel de ingresos, mientras que para un 38,5% se mantuvo en los niveles previos a la enfermedad. Los trabajadores autónomos y los empresarios fueron mayormente afectados.
En tanto, un 15% manifestó que sus reservas monetarias mejoraron como producto del ahorro forzoso que generó la cuarentena en la gastronomía, la recreación, el transporte y los gastos cotidianos.
Sobre el destino de este dinero, el 40% de los entrevistados sostuvo que podrían ir al consumo de bienes y servicios en los próximos meses, factor que será clave para evitar una caída importante en el nivel de consumo agregado.
“La pérdida de poder adquisitivo y el miedo a una crisis económica se consolidan como los dos factores que más desincentivan las decisiones de consumo. No obstante el espíritu viajero fue fomentado en este período al igual que la necesidad de conocer otras realidades”, subrayó Singerman.