Un poco de oxígeno ante la asfixia provocada por el encierro obligatoria. El Gobierno de Alberto Fernández anunció ayer la instrumentación de un bono de $10.000 para monotributistas de las categorías A y B, y trabajadores independientes e informales, en el marco de las medidas tomadas para paliar los efectos económicos por el coronavirus.

El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró que esta medida, que complementa a las anunciadas días atrás, beneficiará a unas 3,6 millones de familias que viven del día a día y no cuentan con otros ingresos, a excepción de la Asignación Universal por Hijo (AUH). Recalcó que está apuntado únicamente para trabajadores independientes en situación de informalidad y monotributistas de las categorías más bajas, mayores de 18 años y quienes no estén jubilados o pensionados. Dijo que se trata de un pago único que se realizará en abril, pero advirtió que podría repetirse si las circunstancias lo ameritan.

“Se busca que el Estado llegue a familias que hoy no están protegidas por otras prestaciones. No es para jubilados ni para beneficiarios sociales”, explicó Guzmán.

El funcionario, además, destacó que la Argentina es de los pocos países que están adoptando tres medidas simultáneas para morigerar los impactos económicos como consecuencia del virus: proteger el trabajo; extender el seguro de desempleo; y la transferencia directa. “Nos estamos asegurando de que toda persona que viva en la Argentina quede protegida en esta situación de crisis”, reflexionó.

Requisitos

El titular de la cartera de Trabajo, Claudio Moroni, recalcó que con esta decisión se busca llegar a los trabajadores que no cuentan con otros ingresos ni tienen renta financiera. Todo será instrumentado a través de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses). Agregó que no será necesario completar planillas, sino que es probable que haya que complementar información, como adjuntar una cuenta bancaria o establecer otros medios de pago.

El ministro Moroni indicó que habrá un “tiempo cómodo” de inscripción, de entre 10 y 15 días, y que incluso es probable que la Anses directamente contacte a los beneficiarios. A partir de allí se resolverá cuándo se hará efectivo el depósito.

Entre los requisitos detallados por el funcionario están: ser argentino nativo, residente o naturalizado; no poseer otro ingreso; no contar con un patrimonio importante; y no tener rentas financieras. “Realmente es una ayuda extraordinaria para esas familias que tenía un único ingreso. Con un trámite muy simple lo van a percibir. Es compatible con la AUH porque entendemos que apuntan a cosas distintas”, aclaró Moroni. Además, adelantó que hoy seguramente salga publicada la norma en el Boletín Oficial. ”La idea es que (la inscripción) se habilite a partir del 1 de abril”, finalizó desde la Quinta de Olivos.