Desde muy temprano, el calor del verano se hizo sentir en Tucumán y alcanzó su punto máximo en horas de la siesta, cuando la sensación térmica marcó 46.6°.

Con una temperatura de 37° y un sol ardiente, la provincia se encuentra en estado de alerta meteorológica por la ola de calor y por tormentas de variada intensidad, indicó el Servicio Meteorológico Nacional. 

"Se espera abundante caída de agua en cortos períodos, intensas ráfagas, caída de granizo e importante actividad eléctrica", advirtió el informe.