Algunos minutos antes de que comenzara la ceremonia de premiación de los deportistas más destacados del año, los invitados disfrutaron de una recepción en uno de los salones del hotel Sheraton.

Música en vivo, tragos y fingerfoods son parte de este ágape sirvieron para agasajar a los deportistas y sus familiares, además del jurado y otras personalidades vinculadas al mundo deportivo local. Pero lo que más animó la reunión fueron los encuentros, los reencuentros y las charlas entre los invitados.