Desde ayer, una rayuela dibujada con tizas azules y naranjas en la plaza Independencia invita a que los tucumanos que pasean por el microcentro detengan su paso. En la cuadrícula, los primeros casilleros ya son una alerta. Agresividad y humor sexista, puede leerse en las baldosas; como la punta de un iceberg. A ellos le sigue la invisibilidad (un cuadrado igual de peligroso) y -con apenas otro pequeño salto- aparecen las humillaciones. Sólo quedan tres espacios -cargados de “culpa”, “amenazas” y “abusos”- hasta que llegás al final del recorrido: el femicidio. El problema es que en realidad esto no es un juego.

En conmemoración al Día Internacional de la No Violencia Hacia las Mujeres, Tucumán fue sede de diversas marchas, charlas y radios abiertas. Todas ellas con un mismo objetivo: concientizar sobre la problemática de género y abogar por una sociedad donde no haya más víctimas.

“Es importante hacer valer nuestro derecho a una vida sin violencia. Y donde las mujeres entiendan que no es su culpa. Que nada de lo que ellas hacen o dejan de hacer es justificativo para que un hombre las maltrate”, comenta Lucía Briones, subdirectora del Centro de Violencia Mujer y Derechos Humanos. Institución que recibe por semana 20 consultas en relación a ataques físicos, psicológicos o sexuales.

En esta lucha, un nuevo elemento -recién inaugurado por la Municipalidad- resalta entre los árboles y las estatuas de la plaza. De ahora en más, el tercer banco frente a la fuente será rojo y se sumará a la campaña que ya abarca 16 intervenciones locales.

Educar, informar y prevenir son algunos de los objetivos de este “espacio de memoria”, pero -para los especialistas- a la provincia le queda un largo camino por recorrer. Mejoras en las infraestructuras de contención y el accionar policial son algunas de las cuentas pendientes.

BANCO ROJO. Fue pintado en la plaza Independencia.

“Ya llevamos 11 casos registrados y ocho de esas víctimas son del interior. Eso se debe a la desatención de esas zonas por parte del Estado. No hay albergues, terapias, asistencia psicológica ni profesionales a su disposición para que puedan afrontar la situación”, argumenta Ana Ferreyra, miembro del Programa Universitario de Extensión y Desarrollo Social (Puedes) de la UNT.

Todo esto es por vos

Desde hace dos años, lo único que quiere Natalia Ávila es alzar su voz. Con una lámina llena de fotos, ella forma parte de las familias que reclaman por justicia. Todo comenzó en abril, cuando su hermana María Cristina Ávila cayó desde el balcón de su departamento, en el cuarto piso de la calle Congreso al 800.

“Suelo pensar que si alguien hubiese estado ahí para ayudarla, las cosas serían diferentes. Tengo miedo de olvidar su cara, pero no quiero que le pase a nadie más. Eso te quiebra y a la vez, te impulsa”, reflexiona. Natalia la recuerda cada vez que ve a su sobrino de 2 años, de quien tiene la custodia. “Cuando encuentro alguna pareja discutiendo algo se mueve adentro. Hace unos días un hombre estaba gritándole a su pareja en plena calle. Automáticamente me acerqué a la chica. No quiero que nadie más termine así”, resalta.

Yanina Lizárraga es otra de las personas que luchan contra este silencio en las calles. “Ya no podría callarme. Soy incapaz de hacer la vista gorda porque también sufrí violencia de mi papá. Entendí que tenemos que hablar para que otros comprendan que un chirlo o falta de respeto ya es violencia”, enfatiza la hija de Claudia Lizárraga, una mujer asesinada a puñaladas por su esposo en una plaza del barrio Jardín. “Hay que seguir marchando para que las mujeres sepan que no están solas. Con las movilizaciones mi familia encontró contención. A pesar del tiempo que pasó el dolor lo sigo teniendo, es algo que nunca va a borrarse”, agrega, embargada por el recuerdo de su madre y 21 años de denuncias ante oídos sordos.

Cifras

- 11 femicidios se cometieron en Tucumán en lo que va del año.

- 576.360 hechos de agresión figuran en el Registro Único de Casos de Violencia Contra las Mujeres. Se produjeron en todo el país entre 2003 y 2018.

- 246 femicidios fueron registrados este año en todo el país por el observatorio MuMaLá “Mujeres, Disidencias, Derechos”.

- 1 muerte por violencia machista ocurre cada 32 horas en nuestro país.