Si hay planteles que hicieron historia en Atlético, uno que ocupa un lugar preponderante en el corazón del hincha es aquel que en 1987 logró el ansiado ascenso a la B Nacional de la mano de Luis Benito Sosa. Estuvo conformado en su totalidad con jugadores tucumanos, varios de los cuales luego pasearon su prestancia por otros campos de juego.

En el 86, cuando fueron a buscar a Sosa, tuvo que agilizar su ingenio para conformar un plantel que estuviera a la altura de las circunstancias. Sosa, que fue un técnico al que siempre le tocó administrar pobreza, no lo asustó el tema, pues estaba ante el mayor desafío de su carrera; dirigir a uno de los dos grandes de Tucumán.

18 partidos jugó Atlético en las dos fases que disputó:18 en la primera y seis en la segunda

Y vaya si aprovechó la chance que se le presentó. Primero se consagró campeón liguista y luego colaboró para que Atlético consiga el ascenso a la B Nacional, algo que parecía un sueño por las prioridades que se había trazado en el comienzo del ciclo.

70 % de los puntos en disputa sumó el equipo. Ganó 14 partidos, igualó 7 y perdió tres

El técnico tuvo la satisfacción de consolidar a Antonio Apud y a Raúl Aredes en la titularidad. En sus comienzos futbolísticos, Apud era volante central, pero Sosa consideraba que tenía todas las condiciones para ser 10. “Siempre recuerdo que cuando decidí darle la camiseta 10 a Apud le prometí que lo iba a ‘bancar’ en la medida que pudiera bajar la panza y la cola. Me hizo caso y terminó siendo un jugador notable”, había comentado Sosa en otra entrevista que LA GACETA le hizo para recordar aquel 14 de junio de 1987, cuando tras vencer 2-0 a Sarmiento de Resistencia, con dos tantos de Aredes, conseguía el primer ascenso a la segunda categoría del fútbol argentino, en el partido revancha del que se había jugado una semana antes en Chaco y que los “Decanos” habían triunfado 3-2.

Nueve tantos convirtió Luis Carlos Reartez que terminó siendo el goleador del plantel “decano”

Otro de los jugadores que brilló con luz propia en aquel equipo, fue Fabián García hoy de 52 años) que se inició futbolístico en Central Norte y que a los 19 años desembarcó en 25 de Mayo y Chile.

“Fue un orgullo haber integrado aquel plantel que estaba compuesto por muchachos del medio que teníamos mucho hambre de gloria. Esa fue la clave de una consagración”, dijo el “Cuchi” .

45 goles anotaron sus jugadores a través de los 24 partidos que jugó en el Zonal Noroeste

García reconoce que el ascenso no fue para nada fácil. “Todo lo hicimos a pulmón. Cada viaje lo hacíamos en colectivo, recorriendo grandes distancias. Pero el cansancio físico quedaba al margen por la ilusión que teníamos cada uno por entrar en la gloria del club. Por suerte logramos el objetivo. Lo reconfortante es que hace dos años, por iniciativa de Mario Leito, nos dieron un carné vitalicio para que podamos entrar al estadio.”, dijo García.

El “Cuchi” recuerda que en el comienzo del primer partido final contra Sarmiento, que se jugó en Resistencia, la cosa no empezó bien. “Es que ellos rápidamente se pusieron 2-0. Pero esa situación, lejos de bajonearnos, hizo que redobláramos el esfuerzo. Como era un tipo que sabía mucho de fútbol, Luis (Sosa) mandó a la cancha a Aredes, que estaba en el banco. Esa variante, de inmediato tuvo su efecto, porque antes de finalizar el primer tiempo, el ‘Zurdo’ puso el 2-1. Por suerte, en el complemento, logró el tanto del empate, mientras que Fabio Caraccio estableció el 3-2 definitivo que nos dejó abierta la puerta a la consagración que se concretó una semana después, ya que con dos goles de Aredes ganamos 2-0 y coronamos una campaña brillante”, dijo el ex volante.

Fabián García junto a su familia

García: “Éramos un grupo de amigos; nos conocíamos desde muy chicos”  

Luis Fabián Garcia fue un jugador clave en la estructura futbolística de un atlético que en1986 canjeó dudas por elogios. En la foto, el “Cuchi” hoy, junto con su esposa mónica y sus hijas Emilia, Micaela y Mariana.