“Uno que busca de tal manera el poema, es uno que vive en lo secreto”.

Esa idea atraviesa, vital y poderosa, los escritos de la escritora tucumana Inés Aráoz en su libro “Al final del muelle”, por el que acaba de ser distinguida por la Academia Argentina de Letras como la mejor obra de poesía del trienio 2016-2018. La decisión fue adoptada en la última sesión de los miembros de esa institución, de modo unánime y en forma compartida con Juan Carlos Moisés.

La autora recibirá el premio durante la Feria del Libro que se realizará el próximo año (aún sin fecha de concreción), y sumará este reconocimiento a los anteriormente recibidos por otras publicaciones: “Ciudades”, de 1981 (mención y recomendación de publicación en la Bienal de Poesía Ricardo Jaimes Freyre); “Los Intersticiales” (mención especial en el Premio Nacional de Poesía por la producción entre 1984 y 1987); y “Ría”, de 1988 (tercer premio en el Concurso Dodero de la Fundación Argentina para la Poesía).

También publicó “La ecuación y la gracia”; “Mikrokosmos”; “Viaje de Invierno”; “Balada para Román Schechaj”; “Echazón y otros poemas”; “Pero la piedra es piedra”; “Agüita”; “Rojo torrente de fresas”; “Barcos y catedrales”; “Haré del silencio mi corona”; “Todo estaba diseñado para que el caballo rozase apenas la montaña con su cola” y “Otras lenguas”, entre otros.

Múltiples estudios

“Lo secreto no sufre menoscabo del tiempo. Es pura potencia. Lo secreto es el resguardo del mundo y de la humanidad”, afirma la escritora en otra parte de su libro premiado, editado por Leviatán en 2016, donde aparte de su obra original incluye traducciones de textos de Dylan Thomas y de Nikolái Gogol.

No es casual que haya elegido ambos referentes, ya que Aráoz, quien nació en San Miguel de Tucumán en enero de 1945, realizó estudios de lengua y literatura inglesa y de lengua rusa (también tradujo a Marina Tsvjetáieva y a Anna Ajmátova). Su inquietud la llevó también a incursionar en la formación en música y a las aulas de la Escuela de Luthería de la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Tucumán.

Su ingreso en la literatura fue a los 17 años, según le confesó en un reportaje a Osvaldo Aguirre, cuando dejó sus estudios de piano y de viola. Y desde entonces jamás la abandonó.

Perfil bajo

“¿Acaso no es secreto el amor?”, se pregunta en forma retórica en su producción recientemente premiada.

Y el secreto que está expresado literalmente en su obra también se expresa en su vida, dueña de un perfil bajo y alejada de espacios de gran visibilización, como se pudo comprobar el año pasado, cuando fue homenajeada por la Municipalidad de San Miguel de Tucumán en el Museo Casa de la Ciudad, en el marco del ciclo “El valor de la palabra”.

En 2017, Fabián Soberón estrenó el documental “Luna en llamas”, sobre la vida y obra de Aráoz, cinco años después de haberle realizado una extensa entrevista. Los 32 minutos de esta película se proyectarán nuevamente el martes, a las 20.30, en la sala Hynes O’Connor del Ente Cultural (San Martín 251), con el contexto especial de la distinción ya anunciada.