La crisis 2001 es la partera de nuestro presente. El kirchnerismo y el macrismo, enfrentados en este año electoral, son productos de ese terremoto. ¿Cuánto queda hoy en el imaginario argentino de la crisis? ¿Cuánto conservamos los argentinos del temor a una presidencia débil, a las alianzas políticas, a la anarquía y los saqueos, a la confiscación bancaria, la convicción de que solo el peronismo puede gobernar, la desconfianza en nuestra moneda, la aversión a las ideas liberales y al endeudamiento, el antiamericanismo?

Bucear en los oscuros días de 2001 nos puede ayudar a entender mejor el trauma y las repeticiones históricas que nos condicionan como sociedad . En octubre de 2001, la administración Bush decidió cortar el financiamiento a la Argentina. El empujón final al país que merodeaba el precipicio. ¿Qué habría pasado si no lo hacía? La administración Trump impulsó la asistencia financiera en medio del temblor de 2018. ¿Qué hubiera ocurrido si hacía lo contrario?

Preguntas angustiantes para un país frágil.

© LA GACETA