Victoria absolutamente merecida la de Argentina en un partido caliente, especialmente de parte de los chilenos. Un arbitraje otra vez reprobable, el del paraguayo Mario Díaz de Vivar, que repartió amarillas, expulsó injustamente a Messi y soslayó algunas acciones violentas en las que ni siquiera cobró faltas.

Todos los protagonistas apuntaron contra el VAR y contra el árbitro.

"Es difícil entender al VAR. Es injusto. Ya está, no se puede  hacer nada. Hoy era un partido para ganarlo, terminar bien la Copa y se  dio", señaló Franco Armani, arquero de la "Albiceleste".

También dijo lo suyo Nicolás Otamendi: "seguimos luchando contra todo. No importa contra quién, sino mentalizarnos en nosotros y tratar de seguir peleándola".

Arturo Vidal, que jugó a pesar de una lesión, fue otro de los que disparó contra Díaz de Vivar. "El espectáculo lo hacemos los jugadores, no el árbitro", dijo de manera contundente.