El paso del capitán de la Selección por la zona mixta del “Arena Do Gremio” fue con esa sonrisa que entrega el deber cumplido. Pero también había algo más. Este 2-0 sobre Qatar que significó la clasificación argentina a los cuartos de final de la Copa América puede haber sido el mejor regalo que recibió Lionel Messi en vísperas a su cumpleaños número 32, que es mañana.

“Iba a ser complicado (si no ganábamos). Mi familia vino a la cancha y por suerte salió todo bien”, suspiró la “Pulga” que fue clarito en la idea de lo que puede verse de ahora en adelante del equipo. “La verdad, nos dieron una vida, por cómo llegábamos, y ahora hay que aprovecharla. Y sí, obviamente que empieza otra copa”.

Así describe a lo que se viene en la Copa Leo. “Ahora empieza el todo o nada. No podés cometer errores”, destacó sobre lo que será el cruce con Venezuela, el próximo viernes. “Es otra la obligación, porque hay que ganar para seguir con la Copa. Pero ya es de otra manera”, se sinceró el 10.

Sobre si cree que el rodaje puede potenciar al grupo, Messi resolvió: “sí, el equipo tiene que ir creciendo en la competición y esta victoria ayuda para eso también”, que así sea, entonces.