Para conocer cómo funciona el mercado minorista de hortalizas en la Provincia de Tucumán, generando información útil para productores o comercializadores, el Área de Economía del INTA Famaillá y la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Tucumán se unieron en un trabajo de investigación.

Indagar en el volumen y valor del consumo, la segmentación del mercado, los canales de comercialización y los hábitos de consumo de verduras en los residentes tucumanos, requirió la realización de una encuesta en los puntos de venta a minoristas y a consumidores, además de “focus group”, observación “in situ” y entrevistas particulares. Todo esto se complementó con información obtenida de la Encuesta Nacional de Gasto de los Hogares (ENGHo) 2012/13, y el Censo Económico de San Miguel de Tucumán.

Los licenciados en Economía Gonzalo Pérez (INTA) y Mariana Delgado Cordomí (FACE-UNT), en base a los datos obtenidos, explican que entre las verduras más populares se encuentra la papa, el tomate, la cebolla, la zanahoria, el pimiento, la lechuga y el zapallo, considerando las especies más adquiridas por los consumidores.

“La mayoría compra, en promedio, entre tres y seis especies diferentes cada vez que concurre a una verdulería”, señalan.

Si bien el color es el atributo más valorado a la hora de elegir el tomate, la lechuga y la zanahoria -específicamente en el caso de la zanahoria- el tamaño es igualmente importante. Los especialistas señalan que también se observa una relación entre atributos valorados y lugar de residencia.

“Por ejemplo, las personas que viven en el centro de la ciudad se fijan preferentemente en el tamaño de la lechuga, mientras que las que compran en verdulerías alejadas lo hacen en la firmeza. Esta tendencia puede explicarse porque las verduras ofrecidas en la zona céntrica son de mayor calidad, llevando a los consumidores a buscar otros atributos, sin preocuparse por la firmeza porque la dan por hecho”.

Otro dato surgido es que las verdulerías de barrio son los lugares de venta más concurridos en la provincia. “En promedio, un 75% de los consumidores compran habitualmente en el mismo local, mostrando un alto nivel de fidelidad con el canal. Según la percepción de los verduleros, el 67% de sus clientes son fijos, lo que comprueba esta tendencia”, aclara Pérez.

Fidelidad

En cuanto a la causa que lleva a los tucumanos a hacer sus compras siempre en el mismo lugar, las respuestas difieren notablemente en la percepción de verduleros y consumidores. “La principal razón que guía a las personas consultadas a comprar recurrentemente en un lugar es la cercanía a su domicilio o lugar de trabajo. Sin embargo, los verduleros sostienen que se debe al trato recibido”, plantea Delgado Cordomí.

Con respecto al motivo por el cual compran verduras, entre el 70% y el 75% de los ciudadanos lo hace porque considera sano consumirlas o porque les gusta; mientras, que un porcentaje menor lo hace para comer variado o porque las consideran más baratas que la carne.

Relacionando el consumo con el género, el 75% de las personas que compran verduras son mujeres. “Ellas consumen más cantidad y variedad de especies que los hombres y, también, gastan más. Puntualmente, ingieren más lechuga y tomate que los varones”, afirman los investigadores.

Por último, se detectó una relación positiva entre edad e ingreso del ciudadano y consumo de verduras, es decir, a mayor edad y nivel de ingreso más verduras compra. En este sentido, los licenciados indican que “los hogares de mayor ingreso compran más cantidad de especies, aunque esto no se vea reflejado en kilos y monto gastado. Hacen sustitución, comprando verduras livianas, como las de hojas, antes que pesadas como la papa. Específicamente, detectamos que a mayor ingreso hay más consumo de acelga, albahaca, chaucha, choclo, lechuga, tomate, zanahoria y zapallito”.