Una llamada a primera hora y otra hacia el cierre de la jornada. Esa es la mecánica de la comunicación entre el gobernador, Juan Manzur, y el vicegobernador en ejercicio del Poder Ejecutivo, Osvaldo Jaldo. Las consultas están relacionadas con la agenda que se desarrolla en Tucumán durante la ausencia del mandatario, que encabeza una misión científica, comercial y académica en Israel. Manzur fue recibido ayer en Haifa por autoridades maronitas en la Iglesia Saint Lois (foto). Allí se ofició una misa, mientras una banda de música juvenil acompañó su paso por las estrellas calles de la ciudad israelí.

Respaldo

La cuestión de seguridad sigue siendo un dolor de cabeza para el Gobierno. Sin embargo, el gobernador afirma que no hay motivos para pensar que habrá cambios en esa área sensible de la gestión. Al ser consultado por LA GACETA, Manzur remarcó que se están incorporando cadetes para la tarea preventiva, mientras se intenta cerrar acuerdos para dotar de mayores elementos a la fuerza de seguridad local. Además respaldó las acciones que encara el ministro de Seguridad, Claudio Maley, fuertemente cuestionado desde la oposición. También le dio un voto de confianza a la cúpula policial.

Contacto con Buenos Aires

El mandatario tampoco descuida sus contactos con la política nacional. De hecho, ayer recibió una llamada del jefe de Gabinete nacional, Marcos Peña, quien lo invitó formalmente a ser parte de la cumbre de líderes del Grupo de los 20, que se realizará a fines de este mes en Costa Salguero. Manzur será parte de la delegación que acompañará al presidente, Mauricio Macri, durante ese encuentro de los jefes de Estado de las principales potencias del planeta. Según trascendió, el titular del Poder Ejecutivo tucumano fue sondeado por la Nación acerca de cuál será la conducta de los senadores por la provincia cuando el proyecto de Presupuesto 2019 sea tratado en el recinto. Actualmente, hay un distanciamiento de la Casa de Gobierno con los representantes por Tucumán, José Alperovich y Beatriz Mirkin. Ambos adelantaron que no acampañarán el cálculo de gastos y de ingresos de la Nación para el año electoral que se avecina.

Opta por el silencio

“No tengo nada que decir; qué puedo contestar”. De esa manera respondió Manzur cuando se le consultó acerca de las críticas realizadas por la senadora nacional Beatriz Mirkin, que le recordó al gobernador que creció de la mano de José Alperovich, hoy en la vereda de enfrente del oficialismo. Lo más comentado de ayer fue precisamente las respuestas del ministro de Gobierno Regino Amado, que señaló que “el alumno superó al maestro”. El oficialismo defiende la fórmula Manzur-Jaldo. Sus dirigentes sugirieron al mandatario mantenerse en silencio y no salir a “pelear en el barro”.