La Policía buscaba a “Tuty”, como lo conocían en la zona de San Pablo, desde mediados de este año por el homicidio de Priscila Paz. Ayer, el hombre, de 42 años, fue hallado y puesto disposición de la Justicia, por lo que se convirtió en el noveno detenido en la causa.

El arresto había sido requerido por la fiscala María del Carmen Reuter, a cargo del proceso de instrucción, luego de que uno de los imputados mencionara a “Tuty” en su declaración en Tribunales.

PRISCILA PAZ. ARCHIVO

A partir de los dichos del acusado, en la Fiscalía se sospecha que el nuevo detenido, quien permanecía prófugo, fue una de las personas que habrían trasladado el cuerpo de la víctima en una camioneta. Se espera, a partir de ahora, que los responsables de la investigación reúnan las pruebas que permitan confirmar o desechar esa hipótesis.

Ya se ha dictado prisión preventiva para Juan “Salteño” Gómez, quien podría haber actuado como el entregador. También para Facundo Damián “Can-Can” Miranda; Walter Patricio “Borolo” Miranda; Héctor Jesús “Pocho” Ledesma; Franco Emanuel Ogaz y Yanina Paola “Kingkona” Rojas, por tener algún tipo de participación en el hecho. A estos se sumó Verónica Argota, quien es señalada como la mujer que se encargó de cuidar a Paz cuando estuvo cautiva.

Priscila, de 21 años, fue hallada sin vida nueve días después de su desaparición, el 22 de julio último. Su cuerpo yacía en un cañaveral de la comuna de San Pablo, cerca de su casa.

TRAGEDIA. El cuerpo de Priscila Paz fue encontrado en un cañaveral, en la localidad de San Pablo. LA GACETA / FOTO DE Analía Jaramillo (ARCHIVO)

La joven había salido de su trabajo y, mientras esperaba el colectivo, fue trasladada hasta el barrio Ampliación Elena White. Allí, habría estado encerrada durante todos esos días. Se cree que la mujer permaneció en ese barrio y luego fue asesinada y arrojada al predio.

La fuga

El lunes durante la madrugada, otro de los detenidos por este caso se fugó de la seccional 1ª. Se trató de Lucas “Maldito Peke” Pérez, quien se encontraba alojado en la dependencia de calle San Martín al 200. Estaba detenido también con prisión preventiva: habría participado cuando interceptaron a la víctima al salir del trabajo.

Por la huida, el fiscal Claudio Bonari dispuso la detención del cuartelero que estaba de guardia en la dependencia policial.