“Programa de radio asusta al país”, publicó el Boston Daily Globe. “Muchos huyeron de sus casas ante la guerra química de Marte’”, tituló The New York Times. Era la reacción de los grandes diarios a la transmisión más famosa de la historia de la radio, que en 1938 desató la histeria en Estados Unidos.

Hoy hace 80 años que Orson Welles y el Teatro Mercury adaptaron la novela de ciencia ficción “La guerra de los mundos”, de H. G. Wells (no eran parientes), a un guión de radio en el que se alternaba alegre música de tango con dramáticos boletines de noticias sobre una invasión marciana.

Supuestos reporteros y testigos presenciales describían monstruos alienígenas que habían aterrizado en una pequeña localidad de Nueva Jersey. Se consultó a científicos y personas histéricas interrumpieron la emisión, recuerda la agencia de noticias DPA.

El programa de radio, que sólo duró una hora y fue emitido por la cadena CBS la noche anterior a Halloween, sonó escalofriantemente real, pero ni los marcianos existían ni tampoco el pánico nacional de los títulos sensacionalistas.

Al reportaje, narrado en un estilo dramático por un joven Welles, sólo lo escucharon unos pocos millones de personas, ya que al mismo tiempo la principal radio de la competencia, NBC, emitía una popular comedia. Pero los medios sacaron provecho del pánico de aquellos que se creyeron que realmente los marcianos estaban invadiendo la Tierra. En la Universidad de Michigan se analizaron 1.400 cartas escritas por los oyentes tras la emisión. Muchos elogiaban al actor y director y lo calificaban de genio, pero también expresaban su preocupación por el efecto de los medios de comunicación en la sociedad.

Alerta

Coincidiendo con el 80° aniversario, se ha comenzado a digitalizar las cartas para ponerlas a disposición de colegios e institutos, con la intención de alertar sobre las consecuencias de las noticias falsas, en tiempos en que pululan en las redes sociales.

Pese a que Orson Welles y su equipo alertaron antes y después de la transmisión que se trataba de una broma de Halloween, el daño ya estaba hecho. La Policía se vio desbordada por las llamadas de emergencia, envió patrulleros a la emisora y los periodistas se abalanzaron sobre la historia.

Con ello Welles se convirtió en el niño prodigio de los nuevos medios. Tenía 23 años cuando creó el genial radioteatro, y a los 26 dirigió y protagonizó “Ciudadano Kane” (1941), considerada una de las mejores películas de la historia del cine.