Tenía una orden de captura desde dos meses atrás, pero no habían podido atraparlo hasta esta mañana, cuando lo redujeron en pleno microcentro de la capital.

Alrededor de las 10, un equipo de la división Delitos Contra la Propiedad realizaba tareas investigativas en la zona de calles Junín y Maipú cuando advirtieron que un hombre entró rápidamente a un estacionamiento tras reconocer la presencia policial.

Pero estos lo siguieron y le pidieron la documentación del auto al que estaba por subir, un Ford Focus negro. El hombre se puso nervioso y respondió que solo tenía una cédula, la cual indicaba que el vehículo estaba a nombre de otra persona, oriunda de Termas de Río Hondo.

Ante tantos indicios, los policías lo trasladaron a la base de la ex Brigada de Investigaciones, donde le tomaron las huellas dactilares. Fue entonces cuando se llevaron una sorpresa: el hombre, de 37 años, tenía pedido de captura desde hace dos meses.

Según se informó, la Justicia Federal lo buscaba por ser sospechoso de integrar una banda de narcotraficantes que operaba en Salta y Tucumán. Casi todos sus miembros habían caído el mes pasado, cuando se realizaron allanamientos en distintos puntos de la capital.

Los policías le informaron la situación al Juzgado Federal Nº2 de Tucumán, que ordenó que quede detenido e incomunicado.