Luego de que el árbitro Wilson Pereira Sampaio pitara el final del partido en el estadio Nicolás Leoz comenzó el festejo de los jugadores de Atlético. La alegría se extendió hasta el vestuario, donde los jugadores se dedicaron del clásico rival.

Los integrantes del plantel tucumano vivieron una fiesta en Asunción tras el empate 0 a 0 ante Libertad que los depositó en los octavos de final. Un hecho inédito para un equipo de la región.

Cristian Lucchetti, quien se recupera de una lesión, se sumó a la celebración en el vestuario, desde donde le dedicaron el logro a San Martín.

Minutos después, la delegación partió hacia nuestra provincia en un vuelo privado de la empresa Amaszonas. La historia continuará después del Mundial.