Un hombre que se dedica a recuperar algunos objetos de la basura en Concepción, se dio el miércoles pasado con una sorpresa: en un contenedor ubicado en plaza del barrio El Nevado encontró un pan de trotyl de 200 gramos conectado a un detonador.

Según la policía, tal como se encontró el explosivo, había un alto riesgo de que estallara. Por ello, una vez producido el hallazgo, se procedió a cortar el circuito del detonador. Este elemento se encontraba en una caja de madera adosada a una especie de maqueta de exhibición. El trotyl o trinitrotolueno (TNT) es un material explosivo.

La Policía inició las averiguaciones desde ese momento para saber cómo llegó hasta ahí el artefacto. Al respecto, no se deslizó ninguna hipótesis hasta ahora.


Lo cierto es que, según fuentes policiales, en caso de que hubiera explotado, habría producido un enorme daño a su alrededor. En el momento del hallazgo, en la plaza se encontraban dos agentes de la Guardia Urbana Municipal. La situación alarmó a los vecinos de la zona, debido a que en el paseo público se concentran numerosos niños durante el día.

El jefe de la comisaría local, Ariel López, manifestó que “afortunadamente” el descubrimiento se produjo antes de que el explosivo hubiera sido movido o manipulado por otras personas.

En noviembre del año pasado, cinco granadas fueron halladas en el barrio Sutiaga, en la capital de la provincia. Entonces, los Bomberos dijeron que no había peligro de que los artefactos estallaran.