El gobierno de Santa Fe inaugurará mañana en Rosario el acuario de agua dulce más grande del país y único en su tipo, que vincula la investigación científica y tecnológica de la biodiversidad del río Paraná con la educación y la recreación.

El centro científico, tecnológico y educativo "Acuario del Río Paraná" es una iniciativa de la Secretaría de Proyectos Especiales e Innovación Social del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la provincia, que demandó una inversión de 220 millones de pesos.

La construcción comenzó a fines de 2011 en el Parque Alem, sobre la costa del río Paraná, un predio de dos hectáreas de las cuales 5.000 metros cuadrados corresponden a un edificio de tres niveles para albergar las peceras, juegos interactivos, laboratorios y el área administrativa.

"Es un proyecto integral basado en tres ejes", uno de ellos "la divulgación y educación científica del ecosistema de los humedales del río Paraná", dijo a Télam la ministra de Ciencia, Erika Hynes.

Otro eje, explicó la funcionaria, "es la investigación científica y tecnológica, a fin de establecer bases para el manejo sustentable de los recursos naturales del río, fomentando la acuicultura como producción alternativa".

El tercer propósito, detalló Hynes, "es social, para construir lazos y desarrollar programas con las comunidades vinculadas a la producción, la conservación ambiental, la cultura y el esparcimiento en relación al río Paraná".


Por sus dimensiones "el acuario de agua dulce es único en el país, pero nos gusta destacar que es único en su concepto, porque es un centro que tiene integrado la investigación y el aprendizaje con la recreación, lo social y el turismo", expuso.

Hynes dijo que allí trabajan "científicos del Conicet y de la Universidad Nacional de Rosario que estudian los peces autóctonos del Paraná, que ya caracterizaron a más de 90 especies, y además prestan servicios a los acuicultores de la zona".

"Es un centro de referencia a nivel nacional, puesto que productores de todo el país y de Santa Fe han venido a consultar a nuestros científicos, quienes a su vez tienen relaciones con otros investigadores latinoamericanos y del mundo", remarcó.

La bióloga Silvia Arranz, coordinadora científica del Centro, comentó que en la decena de inmensas peceras del acuario hay alojadas "unas 80 especies autóctonas del río Paraná inferior".

"Esta cuenca es una de las más biodiversas del mundo en cuanto a la cantidad de especies de peces, y se calculan que podrían haber entre 200 y 240", apuntó Arranz mientras mostraba a Télam el sistema de peceras interactivas del acuario.


Estas son como a grandes tablets en las que el público puede ver las particularidades de cada especie. "Hay una parte lúdica y juegos para niños donde pueden descubrir qué especies hay en el río y distinguir unas de otras", agregó Arranz.

"Se montó un set profesional de fotografías: cada una de las especies se fotografió viva con la máxima resolución posible, que incluso a los investigadores nos permite ver mínimos detalles de importancia en cada pez", explicó la coordinadora, que cuenta además con otros dispositivos tecnológicos y juegos interactivos en 3D.

Los visitantes podrán ver "a los científicos trabajando en un espacio totalmente transparente. Ellos les dirán para qué investigamos uno de los ecosistemas de agua dulce más importantes del mundo", dijo el director general del acuario, Andrés Sciara.

Tras definirlo como "un centro multipropósito", Sciara dijo que el acuario "no es sólo un espacio para la observación y recreación, sino un lugar estratégico para la generación de conocimiento científico, la divulgación pedagógica de la biodiversidad autóctona y la toma de conciencia en el cuidado del medio ambiente".