La Municipalidad capitalina implementó un nuevo sistema para evitar los estacionamientos en doble fila, a través del cual se le coloca un calcomanía en la luneta del vehículo infractor, que evidencia que se encuentra fuera de las normas.
"Se hace además del acta de infracción, que se labra, y luego se le coloca el calco", dijo el subsecretario de Tránsito, Enrique Romero.
Según el funcionario, la calcomanía tiene por objeto lograr que los infractores "entiendan que están perjudicando a otros ciudadanos, no solamente a los que están transitando por la calle, sino también a los que están bien estacionados, que no los dejan salir".
Como era de esperarse, la medida generó rechazos por parte de conductores que no aceptaban que se les colocara una calcomanía en sus vehículos, por más que estuvieran mal estacionados.