A mediados de los 90, cuando el doctor Jorge Alonso comenzaba a hablar en público sobre Fitomedicina, muchos de sus pares miraban extrañados que un médico expusiera sobre plantas medicinales. “Era un bicho raro y cuando me autorizaban a hablar en ámbitos académicos me decían: ‘podés hablar de las plantas, pero no te metás con el cáncer’ y así ponían límites”, recuerda el especialista.

En 1997 Alonso publicó su primer libro, “El tratado fitofármaco”, referido a las propiedades de las plantas, con fundamentos científicos. “Hasta ese momento -explicó-todo lo que se publicaba eran panaceas que, a veces, no tenían fundamento; en cambio este libro presentaba lo concerniente a las investigaciones, lo que realmente servía, lo que no; las dosis, cuáles eran los peligros y cuáles las verdaderas utilidades”.

Alonso dictará hoy a Tucumán un taller de Fitomedicina, a las 14, en el Tucumán Center (25 de Mayo 230). Está dirigido a profesionales de la salud (médicos, farmacéuticos, veterinarios, odontólogos, kinesiólogos, licenciados en Nutrición, entre otros) y se denomina “Fitomedicina; nuevas investigaciones”.

Si bien las hierbas están al alcance de cualquiera, hay que tener cuidado con ellas. “Advertimos sobre las plantas que pueden tener una contraindicación; por ejemplo, la melisa es una planta relajante y tonificante a la vez del sistema nervioso, que se usa para tratar la ansiedad, la depresión, la tensión nerviosa, pero está contraindicada en pacientes que sufren problemas de tiroides”, destacó Alonso.