BUENOS AIRES.- El ex secretario de Comercio Interior kirchnerista Guillermo Moreno fue condenado ayer a dos años y medio de prisión “en suspenso” y a “la inhabilitación absoluta y perpetua” para ejercer cargos públicos, por usar fondos del Estado para comprar cotillón contra el Grupo Clarín. También fueron hallados responsables del delito los ex directivos del Mercado Central Fabián Dragone y Guillermo Cosentino (ex gerente del ente concentrador).

El Grupo Clarín había pedido para Moreno seis años de cárcel y 10 años de inhabilitación. Al enviarlo a juicio, el juez Claudio Bonadio sostuvo que el ex funcionario creó “una situación objetiva tendiente a generar odio y persecución, induciendo a actuar contra el grupo empresarial, ya que otros funcionarios públicos han exhibido elementos con las mismas frases en diversos sitios públicos”.

Antes de conocer el fallo, Moreno reclamó al Tribunal Oral Federal 6 que diera su veredicto “en función de la Justicia y no del poder. Si me condenan le van a decir a cada ciudadano argentino que decir ‘Clarín miente’ es un delito y eso aberra el sentido común”.

El ex funcionario habló de la relación del kirchnerismo con el multimedios. “Clarín había declarado la guerra, sabíamos porque lo anunció. Hubo un pacto de caballeros. Ellos avisaron ‘empezamos la guerra’ y ejercimos dentro del Estado de derecho la libertad de opinar”.

Moreno acudió a los tribunales de Comodoro Py junto con militantes que estuvieron a la sala de audiencias y lo vivaron y aplaudieron durante su alocución. Sobre todo en los tramos en los que se refirió al gobierno de Mauricio Macri, al que consideró “irresponsable en la política económica”. Aseveró, justamente, que ello “genera transformaciones muy violentas de poder”.

Entonces exhortó a “pensar si este poder es permanente y se vino a quedar; o si estamos en presencia de uno de los gobiernos más irresponsables que los argentinos hemos tenido que transitar”.

Concluyó con una advertencia a los jueces. “Les alerto desde mi propia especificidad que si toman la decisión desde el poder, y es legítimo que la tomen, analicen que quizás estamos ante una situación muy transitoria. Todo es redondo, como dicen los muchachos del barrio, y a la larga esto va generando una situación donde esto va de ida y vuelta si es desde el poder”. (DyN)