La Ciudadela es un barrio popular, donde el entusiasmo por el fútbol se respira en las calles adoquinadas. Las construcciones de fachadas antiguas alternan con locales comerciales de llamativos carteles, con viviendas familiares, con fondas y hasta con un hotel cinco estrellas. Una de esas tantas casas alberga otra pasión, no ya por el deporte, sino por construir y trasformar un trozo de madera en un instrumento musical, en una caja de sonidos que pronto estará acompañando veladas de asados entre amigos, ensayos o recitales. Allí, en una vieja casona, viven Luis Mendilaharzu (33 años, tucumano) y Alejandro A. Gelfo (25, cordobés). Los presentó la la carrera de Luthería, oficio artesanal que combina mates, maderas y gubias. Aquí también se respira pasión, pero por la creación de guitarras, violines, chelos, charangos y otros artilugios destinados a la maravillosa tarea de hacer música.