Medio centenar de manifestantes reclamó por la renovación de los contratos de 30 trabajadores de la Secretaría de Adicciones con una olla popular.

“Las elecciones pasan pero los problemas quedan. Lo que más aumentó en los barrios son el paco, los suicidios y el hambre. Pedimos más presupuesto, que no haya precarización y que cumplan la ley de Emergencia en Adicciones. Un grupo está trabajando sin cobrar hace 10 meses”, explicó el psicólogo Emilio Mustafá.

Gabriel Yedlin, ministro de Desarrollo Social, aseguró que se continuarán con los contratos gracias a una ampliación presupuestaria.